La autovía A-57, que discurrirá desde Vilaboa hasta O_Confurco, en las inmediaciones de Porriño, y la futura autovía entre Pontevedra y Vigo, que tendrá el mismo punto de origen pero desembocará en Peinador después de circunvalar Redondela, no son dos carreteras paralelas y no existe ninguna duplicidad entre ambas pese a que discurrirán muy próximas a lo largo de unos 9 kilómetros, un tercio del recorrido total aproximadamente. Así lo asegura el Ministerio de Fomento en una de las respuestas a las miles de alegaciones formuladas en los últimos meses contra este ramal de la A-57. El concello de Pontevedra y vecinos de Pontesampaio, Arcade y otras zonas próximas, se mostraron contrarios desde el principio a este trazado elegido para este ramal, de 23 kilómetros de longitud, y apostaban por otro más corto. Fomento descartó variaciones en el plan inicial y ahora recibe el respaldo expreso del Ministerio de Medio Ambiente, con su autorización sectorial al trazado.

La respuesta de Fomento a la principal objeción pontevedresa expone que el objetivo de esta autovía Pontevedra-Vigo, complementaria de la A-57, es "solucionar los problemas de congestión en todo el corredor, en especial en la travesía de Redondela, mejorar la conexión con el Aeropuerto de Vigo, disminuir el ruido provocado por el tráfico rodado en las poblaciones con travesías, impulsar el desarrollo económico y la cohesión social de la región, mejorar los intercambios comerciales en la zona y mejorar la conexión entre Vigo y Pontevedra". En relación con la posible duplicidad de trazado con el de la A-57, el ministerio admite "que existe cierto paralelismo, en un tramo de unos 9 kilómetros, pero también existen grandes diferencias funcionales entre ambas, ya que la A-57 atiende más al tráfico de largo recorrido, mientras que la nueva vía atiende también al tráfico de medio recorrido con origen o destino en las localidades de la zona de estudio, que no son atendidas por la A-57".

Más de 23 kilómetros

Durante el proceso previo, Fomento llegó a manejar 56 alternativas de trazado, que después redujo a las 14 estudiadas. Mientras el ministerio aportaba por la 5, en el eje Vilaboa-O_Viso-Ventosela, el concello pontevedrés reclamó la selección de la 11, que arrancaría en la A-57 a la altura de Pazos de Borbén, evitando así Pontesampaio. Fomento responde que la opción seleccionada "es funcional, económica, territorial y ambientalmente viable, por lo que queda confirmada una autovía de 23.057 metros "que parte del enlace de Vilaboa de la A-57 con la N-550 y bordea los núcleos urbanos de Pontesampaio y Arcade, desplazándose algo hacia el Este para pasar por el término municipal de Redondela. Cruza el río Verdugo mediante un viaducto de 280 metros y enlaza con la carretera provincial EP-2908 en el enlace de Arcade. Después, la traza discurre al Este de los núcleos de Ventosela y Reboreda, donde intercepta con la carretera PO-250, donde se ubica en enlace de Redondela Norte. Discurre después por las cotas más bajas del monte Redondela, hasta alcanzar el núcleo de San Paio de Arriba y cruzar posteriormente el río Louro. Hasta este punto, el trazado va paralelo a la N-550, bordeando por el Este el núcleo de Os Valos y cruzando la N-550 y el río Louro con un viaducto de 180 metros. Tras discurrir por los concellos de Redondela y Mos, finaliza en el enlace del aeropuerto de la AP-9. Se diseñará con una velocidad máxima de 100 kilómetros por hora, con cuatro carriles de 3,5 metros de ancho.