El segundo premio, dotado con 500 euros para asistir a la feria científica vasca Zientzia Azoka, correspondió al diseño de un cohete de combustible sólido utilizando una mezcla de nitrato de potasio y azúcar, lo que provoca una reacción de gases que impulsan el proyectil. Pablo Portela y Brais Pazó, del Colegio Eduardo Pondal de Cangas do Morrazo (Pontevedra), se inspiraron en los principios físicos utilizados por la NASA para fabricar sucesivos prototipos capaces de alcanzar cada vez mayor altura y aceleración.