La fiscal pidió ayer tres años de prisión para un vecino de Vilardevós acusado de quemar alpendres y diversas propiedades agrícolas en el pueblo de Terroso, en Vilardevós, entre octubre y diciembre de 2016. El ministerio público le imputa un delito continuado de incendio, otro de daños y uno de quebrantamiento de medida cautelar ya que, después de que el Juzgado de Verín dictase una orden de alejamiento respecto a los vecinos que le denunciaron, fue sorprendido en el tejado de la nave de uno de ellos con una botella de aceite con la que presuntamente pretendía provocar un incendio en la propiedad.

Este hecho provocó un nuevo auto judicial el 22 de enero de 2017 por el que el acusado ingresó en prisión preventiva. Dicha orden fue confirmada por la Audiencia Provincial un mes después, por lo que el acusado, que continúa privado de libertad, acudió ayer a la vista oral que se celebró en el Juzgado Penal 2 de Ourense bajo custodia policial.

La fiscal pidió tres años de prisión por el delito continuado de incendio y cinco años de prohibición de acercarse a la localidad de Terroso o a 500 metros de cualquiera de los vecinos perjudicados. Además de pena de multa por los otros dos delitos, la fiscal pide que cubra los daños causados por los incendios, que superan los 23.000 euros.

El acusado negó los hechos y afirmó que no tenía buena relación con los vecinos. La Fiscalía, en cambio, le considera responsable de la sucesión de fuegos que desde octubre y hasta finales de 2016 se registraron en la aldea, hasta que en enero fue sorprendido en el tejado de una de las propiedades con la botella de aceite.

Según recoge el escrito de acusación, el primer hecho que se le atribuye ocurrió el 26 de octubre cuando supuestamente reventó la cerradura del domicilio de uno de sus vecinos con un hacha, sin llegar a acceder a la vivienda. Ese mismo día, y justo enfrente, presuntamente quemó 60 alpacas de hierba que estaban al aire libre en una cuadra de otro vecino. Al día siguiente, según la versión de la fiscal, regresó al mismo lugar y quemó entre 25 y 30 unidades más. Esta acción, señala el escrito, se habría producido también en fechas anteriores. Asimismo, se le atribuye un incendio registrado el 9 de diciembre de ese año en un pajar en el que había 300 alpacas de hierba. Durante la noche del 17 al 18 de diciembre presuntamente prendió fuego a otro alpendre. Como consecuencia de este fuego se cayó el tejado y se quemaron dos tractores de leña. La ofensiva continuó el día de Navidad, cuando supuestamente incendió una nave agrícola en la que ardió maquinaria y diversos aperos de labranza. Tras este hecho, el Juzgado de Verín dictó la citada orden de alejamiento.