El presidente de la Diputación, Manuel Baltar, reconoció ayer en Os Peares, que Rodolfo Prada "ha sido capaz de unir con su intelectualidad la Xeración Nós y la Transición, en un largo período que abarca gran parte del siglo XX, en el que participó en todos los movimientos galleguistas del referido siglo", desde las Irmandades da Fala, en 1918, hasta la transición política y la autonomía, en 1980, año de su muerte, pasando antes por un estrecho contacto con hombres de la Xeración Nós, el PG, la campaña del Estatuto y el plebiscito, en 1936, la acogida a los exiliados y la recuperación cultural, en Buenos Aires, la Galicia Ideal, los conflictos con los galleguistas del interior, en los que fue mediador válido y, sobre todo, hombre de confianza de Castelao, por lo que llegó a gestionar, como albacea, su legado.

La nieta

Participó en el acto de homenaje a Rodolfo Prada, que se realizó en Os Peares, la nieta del intelectual galleguista, María Soledad Prada, que visita Galicia por primera vez, procedente de Chile, país donde reside, así como otros familiares, intelectuales ourensanos, representantes institucionales, culturales y sociales.

La nieta del galleguista agradeció el homenaje impulsado por la Diputación de Ourense, destacando que su abuelo "siempre consideró un privilegio pertenecer a una tierra como Ourense y Galicia". El escritor y presidente del PEN Galicia, Luís González Tosar, recalcó en el acto que Rodolfo Prada había defendido la realidad propia de Galicia, sin necesidad de verse en el espejo de otros modelos de Europa. "Así lo escribió en 1932, en un ideario político sobre Galicia". Tosar indicó que Prada orientó la corriente galleguista de América hacia la reivindicación de nuestra lengua y nuestra identidad, pero "sin extremismos, porque un galleguista no puede caer nunca en el separatismo, precisamente porque el galleguismo es solidario".

Rodolfo Prada nació en Os Peares en 1892 y falleció en Buenos Aires en 1980. Fue el gran valedor de Castelao en Argentina y su albacea testamentario.