La investigación abierta al alcalde de Xunqueira de Ambía, José Luis Gavilanes, por supuesta explotación de inmigrantes ha desatado diversas reacciones en el ámbito político. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pidió ayer "prudencia" a la hora de valorar los hechos en los que también están implicados la exmujer del regidor, Carmen Limia, y el hijo de ambos y expresidente del COB, Antonio Gavilanes. La policía sospecha que emplearon a tres trabajadores inmigrantes sin regularizar en tareas de limpieza de la empresa, instalaciones deportivas e incluso viviendas particulares, sin contrato ni Seguridad Social. La investigación apunta que no percibían salario, sino que supuestamente trabajaban a cambio de un piso compartido y comida. José Luis Gavilanes lo ha negado rotundamente.

Núñez Feijóo propuso ayer "esperar a saber qué hay detrás" de esta investigación. Considera "sorprendente" que los testimonios que ha trasladado el alcalde en su defensa "sean de tanta claridad" y ha reiterado la necesidad de actuar con "prudencia" a la hora de analizar esa "presunta o supuesta conducta", indicó. "Tenemos que saber qué es lo que pasa; entender y enterarnos de qué hay detrás y qué hay de verosímil", manifestó.

En respuesta a la valoración solicitada por el diputado provincial del BNG, Ramiro Rodríguez, en el pleno de la Diputación, el presidente de la institución y del PP, José Manuel Baltar, pidió "respeto" al Estado de Derecho y a la presunción de inocencia: "Hablé con él y personalmente niega todo lo que se desprende de los informes".

También ha reaccionado a esta investigación la CIG, que solicita a la Xunta que retire a Empresa Gavilanes el contrato de transporte que le ha sido asignado: "No se puede mantener una concesión a una empresa cuyo propietario podría estar explotando a trabajadores".