La intención del gobierno municipal, expresada por la responsable del área de Comercio, Belén Iglesias, de llevar el documento de la nueva Ordenanza de veladores y terrazas en suelo público, choca frontalmente con la postura que mantienen los grupos de Democracia Ourensana y Partido Socialista, que están en desacuerdo con el texto.

Es un nuevo revés para el gobierno loca, que sigue sin contar con los apoyos necesarios para poder llevar la nueva ordenanza de veladores para su aprobación. Se trata de un documento "muy necesario" para dar respuesta a los problemas que existen, como reconocen todos los grupos políticos en la corporación. Otra cosa es que encuentren un punto de encuentro y alcanzar ese consenso necesario que permita su aprobación y dar carpetazo a la que está en vigor desde hace casi veinte años.

Por lo de pronto, la posibilidad de que salga adelante son escasas, sobre todo después de que el grupos de Democracia Ourensana dejase patente su rechazo al proyecto presentado por el Partido Popular por entender, en resumen, que "su principio inspirador parece ser priorizar el beneficio del sector hostelero sobre la garantía de los derechos ciudadanos".

De ahí que insisten en que "se prima al sector comercial mientras que no se protege al ciudadano" , como así revelaría el documento que le fue entregado por parte del gobierno popular, en el sentido de que las figuras de protección de sus derechos son "demasiado vagas, abstractas o ambiguas, y la garantía de su ejecución muy difícil en la práctica".

Ocupación de espacio público

A modo de ejemplo señalan que la nueva ordenanza prevé la posibilidad de ocupación de espacio público con todo tipo de elementos de hostelería más allá del módulo clásico de mesa y cuatro sillas; que no se defiende la distancia mínima de 1 metro y 20 centímetros del velador a las entradas de viviendas y garajes; o que se consienten las terrazas pegadas a las fachadas cuando la legislación estatal no lo autoriza.

Además de que no se fija como horario de recogida de terrazas el nocturno de los locales para defender el derecho al descanso de los vecinos, y que se facilita el apilamiento de las terrazas por los soportales, cuando son un elemento arquitectónico tradicional.

Y mientras, sobre la mesa de la responsable de Comercio, varios asuntos relacionados con la proliferación de terrazas "ilegales", en muchos casos sin contar con el correspondiente permiso, y en otros superando las que habían solicitado inicialmente. El problema, denunciado por la oposición, está en el procedimiento administrativo.