Cada varios meses llamaba por teléfono a la Policía para averiguar si había avances en la búsqueda de su violín, un modelo italiano que, más que su cuantía de unos 15.000 euros -el de un estudiante ronda los 600; el de un concertista, 50.000-, guarda un valor sentimental insondable: era el de su abuelo. La dueña, una joven de 30 años formada en el conservatorio de música de Santiago de Compostela y que pidió a las autoridades mantener el anonimato, encontró una pista definitiva en una noticia de prensa. Vio que la Policía Local de Ourense exhibía un violín entre los objetos perdidos más curiosos. Se puso en contacto con la Jefatura y aportó una descripción tan precisa que no dejó dudas. El instrumento legado por el abuelo regresaba a casa 4 años después de que fuera robado. Lo sustrajeron de su coche, en noviembre de 2012, cuando había acudido a las termas ourensanas de Outariz.
La entrega se hizo efectiva la semana pasada, según la Policía Local. La música detalló los lugares del cuerpo del instrumento que tenían marcas del tiempo así como otros detalles que indicaron que definitivamente debía de ser suyo. El violín es de una marca italiana -uno de varios datos solicitados a las autoridades que no facilitaron- y pertenecía al abuelo, que fue músico.
Además del valor sentimental y de la conservación de una pieza de antigüedad, el instrumento había sido restaurado con cuerdas y elementos importados desde Italia, según fuentes policiales. "Cuando lo recogió se llevó una alegría muy grande. Nunca dejó de tener confianza. Cada año preguntaba por él", explican las mismas voces. La dueña actuó al ver una noticia de prensa, el pasado mes de octubre. El instrumento había terminado en objetos perdidos de la Policía Local de Ourense pese a que, tras su sustracción, estuvo en un comercio de venta. La Comisaría no quiso dar detalles sobre su localización, amparándose en que "está en marcha una investigación colateral" pero confirmó que la persona que lo entregó fue investigada pero no se hallaron indicios.
Estuvo en el mercado negro
Los hechos sucedieron en el mes de noviembre de 2012, cuando una pareja de jóvenes aparcaron su vehículo en las proximidades de las Termas de Outariz y descubrieron, a su regreso, que personas desconocidas habían fracturado el cristal del vehículo, sustrayendo del interior una caja de herramientas y un violín.
La Unidad de delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de Ourense se hizo cargo de la investigación, procediendo a la detención de los presuntos autores de los robos con fuerza ocurridos en la zona mencionada y recuperando así varios de los efectos denunciados. Los policías no pudieron recuperarlos todos debido a que muchos, según la Comisaría, entran en el "gran círculo oscuro del mercado negro, como así ocurrió con el violín".
Tras el hallazgo, que dependió en buena medida del interés de la dueña, la Policía sacó pecho: "Todas las denuncias y hechos delictivos que se ponen en conocimiento de la Policía no caen en saco roto como puede creer el ciudadano, ya que las unidades especializadas realizan un minucioso seguimiento de estos delitos independientemente del tiempo transcurrido.
