Ourense recibió la jornada de apertura de las piscinas públicas de Oira con una máxima de 27,4 grados, lo que permitió a los vecinos de la capital disfrutar de un agradable sábado de piscina junto al río Miño. Las instalaciones abrieron ayer al público y se incorporan a la oferta de baño en la capital y su entorno, después de que el pasado sábado hiciesen lo propio las piscinas del complejo deportivo de Monterrei, en este caso con una entrada de 2,30 y 1,30 euros para mayores y niños, respectivamente.
En el caso de Oira, abierta de 11 a 21 horas, el acceso es libre y gratuito. Abre sus puertas con un aspecto renovado después de que el Concello invirtiese 20.000 euros en su reparación y acondicionamiento tras las riadas de enero y febrero que llegaron a cubrirlas al completo por el crecimiento del caudal del río Miño en Velle.
Las últimas e intensas lluvias del mes de mayo retrasaron los trabajos que incluyeron el pintado de los vasos y la restauración del equipamiento de depuración, ya que aunque estos equipos se retiran al final de la temporada, el habitáculo se inunda y esto afecta a los filtros y conducciones. También se acometieron diversos trabajos de albañilería.
Los ourensanos que ayer aprovecharon el día libre para disfrutar del sol y relajarse en una de las zonas recreativas más concurridas de la capital pudieron hacer uso de unas instalaciones que lucían como nuevas, con el azul piscina favorito de los niños. Los bañistas ocuparon enseguida las zonas verdes y extendieron sus toallas para tomar el sol pero fueron más tímidos a la hora de darse un baño en las aguas todavía frías de principio de temporada.
