La reapertura de la residencia universitaria de Ourense, la única de sus características que tiene el campus local, podría estar más cerca tras dos años cerrada al público si la empresa concesionaria aporta al fin la documentación requerida.
Según ratificó ayer el gobierno local, la concesión de la licencia de apertura para la residencia universitaria, que estaba siendo gestionada en el momento de su cierre por por Siresa Campus S.A., "solo depende de la entrega del proyecto de legalización que le requirió por el servicio de Urbanismo".
Según el Concello, el servicio de Urbanismo ya había notificado a Siresa Campus S.A. el pasado 11 de abril el expediente de legalización del edificio, emplazado en la zona 4 del campus de Ourense, una zona que está pendiente de urbanización completa. De hecho, la residencia está afectada por un gran proyecto de viviendas.
El Concello de Ourense explica que este conflicto, que obligó a clausurar por sentencia judicial la residencia universitaria del campus, data de 2013 cuando el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia "dejó sin efecto las licencias de apertura y ocupación, dado que se encontraba en ámbito de suelo urbano no consolidado, y el ayuntamiento se vio en el deber de precintar el edificio".
El actual gobierno local indica que "mantuvimos reuniones con las partes implicadas para resolver el conflicto, incluso después de que la junta de compensación de la zona afectada le ofreciera el terreno al concello para su recepción". Los funcionarios municipales siguen esperando por la documentación necesaria para normalizar dicha recepción.
La firma Siresa solicitó además al Concello de Ourense "aclaraciones técnicas para la tramitación de la licencia de apertura y de ocupación, entre ellos informe de Bomberos, en el que se le explicaba que era preciso recepcionar los terrenos por parte del Concello o la necesidad de presentar un proyecto de obra en vía de legalización del edificio para su uso como residencia universitaria", indicó ayer en una nota oficial el Concello de Ourense para informar del estado de un edificio que preocupa especialmente a la Universidad de Vigo por los muchos estudiantes que habían elegido esta opción residencial, por sus condiciones económicas, la independencia de sus pequeños apartamentos con cocina individuales y su ubicación en el propio campus de Ourense.
Según la última información sobre el estado de esta documentación aportada ayer por el gobierno municipal, el pasado 22 de marzo de este año Siresa presentó en el registro municipal parte de la documentación requerida, "salvo el proyecto de legalización, requisito indispensable para resolver la licencia de actividad y apertura que actualmente demanda Siresa y que daría pie a resolver este proceso y, por lo tanto, a proceder a la reapertura de la residencia", indica el gobierno local.
