La Policía Local de Ourense interceptó este fin de semana a cuatro conductores que conducían bajo los efectos del alcohol. Tres de ellos fueron sorprendidos por los agentes cuando realizaban maniobras negligentes y recibieron el alto de la policía.

Uno de ellos, un hombre de 50 años, conducía una moto Honda por la calle Progreso el viernes a las 22,30 horas. En las inmediaciones de la Diputación se incorporó al tráfico desde la acera sin tomar ningún tipo de precaución, según informó ayer el servicio municipal. El test de alcoholemia arrojó un resultado positivo, triplicando la tasa máxima permitida.

La madrugada del sábado, a las 2,10 horas, una patrulla interceptó un Fiat Stylo zigzagueando por Progreso en la intersección con la calle Cruz Roja. El conductor, de 40 años, cuadriplicó la tasa máxima.

Durante la madrugada del domingo, otra patrulla inmovilizó un vehículo cuyo conductor dio positivo en un control preventivo en la calle Pena Trevinca. El hombre, de 39 años, arrojó un resultado más de dos veces superior a lo permitido.

Ya al amanecer, a las 8,37 horas, los agentes interceptaron en la calle As Burgas un Opel Astra tras realizar una "extraña maniobra evasiva" ante la presencia policial en el lugar. Su conductor, un joven de 23 años, casi triplicó la tasa máxima.