Tras meses de asedio político y mediático sobre el origen de su patrimonio, el alcalde de Barbadás y diputado provincial, José Manuel Freire Couto, ha cedido a la presión y ayer renunció formalmente a presidir el Inorde, un instituto para el desarrollo económico de la provincia que este año ya vio recortado su presupuesto en un 50% pero que mantuvo intactas las remuneraciones de su presidente y del gerente: 110.000 euros anuales, a costa de reducir a 3.000 euros la partida para inversiones reales.

Freire Couto, hombre fiel del expresidente José Luis Baltar al que se abrazó llorando el día en que éste abandonó la Diputación para dejarla en manos de su hijo, lleva meses generando titulares que siembran dudas sobre su patrimonio (declara cerca de dos millones de euros) y que vinculan su riqueza al vertiginoso despegue urbanístico del municipio del que es alcalde. La Agencia Tributaria le impuso una sanción grave por no declarar 208.000 euros sujetos a IRPF durante cuatro años y el PSOE ya anunció que trasladará un dossier de más de 22 páginas a la Fiscalía Anticorrupción y a Hacienda.

Esta renuncia lleva varios días sobre la mesa del presidente Manuel Baltar y ha generado cierto malestar en parte de la militancia, descontenta con las decisiones de su líder que bajo el paraguas de la racionalización se aleja cada vez más de la gestión que mantuvo a su padre al frente de la institución durante 22 años. Desprenderse de uno de los pilares más potentes del "baltarismo" es una gota más.

El actual presidente llegó a reconocer públicamente que el salario de Freire Couto como presidente del Inorde (superior a los 60.000 euros) era un "disparate", si bien no había hecho nada para cambiarlo. Ayer lo recibió en su despacho y aceptó su renuncia para anunciar después que él mismo asumirá la presidencia del Inorde "sin percibir remuneración por ello". El trámite se hará efectivo en el próximo pleno de la corporación provincial, que se celebra el 31 de mayo.

A pesar de que se plantea como una renuncia del propio Freire Couto, la Diputación justifica esta decisión en la "reestructuración" que Manuel Baltar está llevando a cabo en esta institución desde su llegada a la Presidencia, en febrero de 2012. Sin embargo, todo el grupo de gobierno del PP respaldó su gestión al frente del Inorde en el pleno de marzo, en el que el PSOE pedía su dimisión por "defraudador" y por dirigir un instituto que consume el 74% de su presupuesto en las nóminas de 20 trabajadores. El BNG también apoyó esta propuesta pidiendo además la disolución del ente, y el grupo nacionalista de Barbadás reclamó ayer la "dimisión inmediata" como alcalde.

La renuncia de Freire Couto se cerró ayer en una reunión en el despacho del presidente y tras conversaciones previas en las que fuentes del PP aseguran que el alcalde de Barbadás se vio forzado a dimitir. Y a pesar de que la polémica del supuesto enriquecimiento personal planea sobre esta renuncia, el presidente enmarcó la renuncia en un plan de "estrategia operativa".

A partir de ahora, Baltar asume la presidencia del organismo con el objetivo de impulsar nuevos proyectos dirigidos a "favorecer la reactivación económica de los concellos de la provincia y la competitividad de las empresas ourensanas". Tras la aprobación de las cuentas en abril, el Inorde "inicia una nueva etapa que abarca una reorganización administrativa y de competencias para fortalecer el trabajo que este ente viene haciendo por la provincia".