Un funcionario de la Unidad de Carreteras del Estado en Galicia, con sede en A Coruña, asume de forma provisional la jefatura provincial de Ourense después de que el Ministerio de Fomento cesara en el cargo a Adolfo Güell, implicado en una supuesta trama de corrupción en la gestión relacionada con la adjudicación de obras de conservación y mantenimiento en diferentes carreteras de la provincia y de titularidad estatal.

Con esta decisión se pretende evitar que se "paralice" la actividad de la Unidad de Carreteras del Estado en Ourense mientras se siguen las investigaciones en curso, por una parte la de la Inspección General del Ministerio de Fomento y por otro la de la Fiscalía que recibió dos denuncias -en noviembre de 2012 y enero de 2013- en las que se señalaba al propio Adolfo Güell como el principal responsable de la supuesta trama de corrupción.

La investigación que se encuentra en curso se centra en las irregularidades relacionadas con las contrataciones de obras como las supuestas comisiones ocultas, los fraccionamientos de contratos para evitar su publicidad, y una presunta red clientelar de empresas que serían las únicas invitadas a realizar la ofertas, muchas de las cuales las hizo directamente el ya exjefe de la Unidad de Carreteras del Ministerio de Fomento en Ourense, y de las que existen indicios reales, como aseguran fuentes de la propia investigación.

Lo que también es objeto de investigación es el importe de las adjudicaciones de obras desde 2009 a 2012, que según las estimaciones estaría en los 8,5 millones de euros, aunque la cantidad económica final se puede ver incrementada en función de las certificaciones de contrataciones realizadas.

A este respecto, una de las cuestiones que se constata en lo investigado hasta estos momentos es que existen obras certificadas y pagas a las empresas de la supuesta trama que no llegaron a realizarse.