La CIG teme que la guardería o Escola Infantil de A Farixa quede sin cocinero, después de que el titular de la plaza pidiera su traslado a un centro de Monforte y la Consellería de Traballo e Benestar indicara al personal que se interesó por ese destino que no podía adjudicar esa plaza, porque "no es necesaria", destaca Manuel Gallardo Canitrot, representante de la CIG.

Los trabajadores y miembros de la CIG desconocen si se cerrará el comedor definitivamente, lo que supondría un "grave problema" para los padres, o si la administración gallega recurrirá al servicio de catering o a una contratación temporal, que verían como "irregular". De esta forma, Ourense se queda con tan solo dos guarderías que cuentan con personal fijo en el comedor, la de Covadonga y Antela de O Couto.