El número de nacimientos prematuros, aquellos que se producen antes de las 37 semanas de gestación de la madre ha experimentado un importante incremento en el CHOU, hasta alcanzar un 15% más que en pasadas ediciones, de modo que de los 1.800 niños nacidos en el Complejo Hospitalario de Ourense en 2008 más de 250 habrían quedado un tiempo en el servicio de Neonatología por su carácter de bebés prematuros aunque en distinto grado.

Estos datos aportados ayer por los pediatras del servicio de Pediatría del CHOU, Javier Casares con motivo de la presentación de la segunda edición del curso Diálogos en Neonatología, son la consecuencia de todo un conjunto de hábitos sociales, que están incidiendo en una capacidad tan básica como la reproducción humana.

Según Javier Casares “Este aumento de los nacimientos prematuros que se está registrando en Ourense, es debido en la mayor parte de los casos a la gran cantidad de tratamientos de reproducción asistida, como inseminación o fecundación in vitro”.

La otra causa frecuente es el retraso en la edad de la maternidad, que se ha pospuesto por causas sociales y laborales, hasta alcanzar una media en Ourense que ronda los o 33 o 34 años para el primer hijo, con un aumento progresivo incluso de las madres que tienen hijos a edad mucho más tardía.

“También incluimos en la causa de riesgo para un parto prematuro el estrés, que se produce en algunas madres que deciden prolongar al máximo el inicio de la baja maternal, para disfrutar después para esta con su hijo”, apunta Javier Casares.

El pediatra considera que “en este país el permiso de maternidad es uno de los más cortos de Europa, lo que hace que las futura madres prolonguen su vida laboral, cuando en realidad necesitan un merecido descanso no sólo después sino antes del parto, al que no deben llegar estresadas”.

También y aunque en mucha menor medida, siguen produciéndose casos de niños prematuros relacionados con cuadros de tabaquismo, alcoholismo o drogadicción de las madres.

Según Javier Casares se considera que es prematuro un niño nacido antes de las 37 semanas de embarazo, “pero no es lo mismo un nacimiento que se produce antes de las 37 semanas, a otro en el que el parto se produce a las 24 semanas o con bebés con menos 1.500 gramos de peso; los grados de riesgo son muy distintos”, apunta Javier Casares.

En todo caso el Complejo Hospitalario de Ourense, cuenta con una Unidad de Neonatología bien dotada técnicamente, que no tiene nada que envidiar a cualquier otra del resto del país y aquí se puede afrontar perfectamente la atención a prematuros o grandes prematuros, de forma integral, incluso se abordan casi todas la patologías de cirugía infantil”.

Entre los casos de cirugía infantil que se derivan a otros hospitales gallegos, están únicamente algunos cuadros determinados de cirugía cardiaca que vana A Coruña o de cirugía oncológica.

Pero los datos dan cuenta de la calidad de atención de Neonatología en Ourense, pues en el año 1977 esa unidad tenía un indice de mortalidad infantil del 12,5% y en el 2008, apenas llega al 1% de mortalidad. En esta unidad de Neonatología se ingresa a los niños desde su nacimiento hasta los 28 días.

“En el año 2008 de los 1.800 niños nacidos en el CHOU, lo que supone 150 más que en 2007, quedaron ingresados en Neonatología por diferentes motivos 520 , de los cuales algunos eran nacimientos a término pero con algún otro tipo patología. El ingreso en esta unidad es como decíamos hasta los 28 días y a partir de ahí pasan a la unidad de lactantes”. Sin embargo y a pesar de ese riesgo inicial de los grandes prematuros, el trabajo de esta Unidad ha conseguido sacar adelante recién nacidos con situaciones complejas por su escasísimo peso al nacer.