"Seguimos falando e intentando chegar a acordos". Es el único titular que se le puede sacar a los representantes del gobierno tripartito de Cangas sobre la segunda reunión de la mesa de negociación con la empresa concesionaria del servicio del ciclo integral del agua, celebrada ayer en el consistorio. El ejecutivo municipal se mantiene en sus exigencias de moderar las tarifas, o cuando menos mantener las que están vigentes, y que la UTE Gestión Cangas retire su recurso judicial contra las aprobadas de forma unilateral por el Concello, que además son inferiores a las que figuran en el contrato de concesión por 25 años. El hermetismo es la nota dominante entre las partes, amparados en un supuesto pacto para intentar avanzar en la negociación sin presiones externas.
En el gobierno local prevalece la intención de llegar a acuerdos con la concesionaria, aunque sin paralizar la tramitación del expediente abierto con la supuesta intención de rescindirle el contrato, conforme al acuerdo plenario. La UTE Gestión Cangas reiteró al gobierno municipal su interés por continuar en el Concello, aunque quiere que se respete lo pactado y no sufrir quebranto económico. En el ejecutivo cangués es el edil de Urbanismo e Facenda, Mariano Abalo, el más beligerante con los posicionamientos de la empresa y proclive a una rescisión de contrato que sus compañeros de gobierno no ven con tan buenos ojos por el riesgo de que abriría un largo proceso en los tribunales de consecuencias impredecibles y que podría tener un coste muy elevado, en dinero y en tiempo, para los ciudadanos de Cangas.
"Seguimos falando e intercambiando propostas de máximos e de mínimos, como en toda negociación", esquivan desde el ejecutivo cangués, que no aclaran si se han producido avances o las posturas permanecen inmóviles, aunque reconocen que las exigencias de que se retire el recurso judicial y aceptar al menos las actuales tarifas no tienen margen de discusión. "Non queremos tocar os recibos que pagan os usuarios, e se as conversas non fructifican haberá que seguir co expediente aberto para a rescisión", repiten.
Desde el inicio de las negociaciones, el pasado mes de diciembre, el tripartito ha pedido a la empresa que ponga sobre la mesa los datos que permitan determinar el margen de maniobra sin romper el equilibrio financiero, como el dinero recaudado, si las tarifas actuales cubren el servicio o los proyectos e inversiones a realizar. Ayer quedaron en reunirse de nuevo a corto plazo, aunque sin desvelar fecha.
