La Dirección General de Tráfico ha desplazado a Cangas su parque móvil de educación viaria para impartir clases prácticas de circulación a alrededor de medio millar de alumnos, principalmente de segundo y de tercero de primaria de los 10 colegios públicos, concertados y privados del municipio. El programa se puso en marcha hoy en el colegio de Castrillón, en Coiro, en donde se instaló un parque con calles, señales y red semafórica que los escolares recorrieron montados en bicicleta y como peatones, bajo la supervisión de los dos policías de Cangas encargados de las clases. Participaron cerca de un centenar de alumnos, de los que 44 eran de segundo y 50, de tercero.

Las clases prácticas con el parque de educación viaria se extenderán hasta el 31 de este mes, a lo largo de ocho días, con un calendario que incluye su celebración mañana en el colegio de San Roque, también para 94 alumnos. El viernes está previsto en el colegio Nazaret de Cangas, para otros 90. El programa se retoma el lunes en el centro concertado Compañía de María, con 58 alumnos de segundo y de tercero de primaria. El martes está previsto realizarlo en los colegios públicos de O Hío y Espiñeira de Aldán, en donde también se impartirá en este último a los alumnos de cuarto de primaria. Serán en total 21 escolares en Aldán y 43 en O Hío.

El parque móvil se desplazará el miércoles 29 a dos colegios: el concertado Casa da Virxe, para 38 alumnos; y colegio público de A Rúa, para 42. El jueves las clases serán en el colegio concertado Eduardo Pondal, con una previsión de 48 alumnos; y el viernes concluye el programa en el colegio Sagrada Familia de Aldán, con 37 alumnos.

En el acto de hoy, que sirvió de inauguración al programa, estuvo la jefa de Educación Vial de la jefatura provincial de Tráfico, María Elena Rodríguez García, acompañada por el concejal de Ensino, Xoán Carlos Chillón; y el jefe de la Policía Local, Alberto Agulla.

El programa práctico se desarrolla tras las clases teóricas que se estuvieron impartiendo el año pasado en los distintos colegios. Los dos policías encargados de la formación aseguran que los menores interactúan como peatones y conductores de bicicletas. Lo que han visto los agentes en esta primera clase práctica, es que dominan la enseñanza teórica de las señales, saben que los ciclistas deben de respetar al peatón, aunque siempre hay algunas cosas que corregir como también el hecho de que como peatones se abalanzan demasiado hacia el paso de cebra sin detenerse con prudencia a esperar a que los vehículos paren. En este sentido, creen que se debe incidir en una mayor prudencia del peatón.