Ingresó en la Organización Nacional de Ciegos (ONCE) hace unos 11 años a causa de una minusvalía. Josefa Conde se apuntó en la oficina en busca de una plaza de vendedora del cupón y pasado un tiempo la llamaron para ocupar la de Bueu de la que dice, con humor, que ella la hizo buena.
No es para menos. en los últimos tres meses repartió tres premios, de 20.000; 60.000 y el último este pasado domingo, de 3.000 euros, con un boleto del "Super Once".
Cuando en prácticamente todos los hogares se apuran las compras de los últimos décimos para la gran lotería de las loterías del año, como es la de Navidad, el puesto de venta de la ONCE de Josefa Conde hizo que la suerte llamara un poco antes a la puerta de Bueu aunque fuera sólo con este "pellizco" de 3.000 euros. "¡A ver si me entero de quien es la persona agraciada! Aunque sea poca cantidad siempre es una alegría repartir dinero y, sobre todo en estas fechas porque anima a la gente", aseguraba cuando se le preguntaba por el premio, sin saber todavía que lo había repartido ella.
Desde hace unos seis años, Josefa Conde vende a diario los cupones de la ONCE en la calle Montero Ríos, de Bueu, a donde se desplaza desde Vigo, su ciudad de residencia. Lo hace desde las siete de la mañana y si algo lleva mal es el frío porque vende en una de las mejores calles de Bueu pero cara a los vientos fríos del norte y junto a un mar que le hiela los huesos. Puede llegar a vender más de 200 cupones al día y un centenar del Super Once, confirma esta mujer, que ayer se mostraba satisfecha de este nuevo premio.
El Super Once es un producto de modalidad de juego activo formado por una matriz de 80 números, numerados del 1 al 80, y consiste en elegir entre 5 y 11 números de la matriz siendo su orden indiferente. Estos sorteos se celebran todos los días de la semana.
