La disciplina de cuartel se rompe en el Día del Pilar. Los guardias visten su impecable traje de gala y sacan a relucir sus guantes blancos, que antes deslumbraron en la iglesia de Coiro, donde el puesto de la Guardia Civil de Cangas asistió a la misa en honor a su patrona. Más gente que el año pasado tanto en el acto religioso como en el civil, que tuvo lugar en el cuartel de Rodeira. Hasta allí acudieron los tres jueces que prestan su servicio en Cangas, David Pérez Laya, Sonia María Platero y David Prieto Francos, que confraternizaron con los guardias que vestidos de gala, salvo los que cumplían guardia, se afanaban en servir a los numerosos asistentes que llegaron al acto también vestidos para la ocasión. Estaba el alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, y varios miembros de la corporación, entre los que figuraba José Luis Gestido, de Cangas Decide o Alfredo Iglesias, del PSOE. El portavoz del PP, José Enrique Sotelo, estuvo en la misa. El vino español y los pinchos eran una excusa para charlar de los asuntos del día con paciencia de ofrecer unos y otros la cara más amable. Los guardias abrieron sus puertas y también sus sonrisas. Había buen humor en la tropa y en la jerarquía, además, no había llovido en el momento de los pinchos. Y estaban preparados, porque había una carpa preparada resguardar a los invitados de la lluvia. El evento finalizó con el himno de la Guardia Civil.

En Bueu esta fue la primera vez que la Policía Local y la Guardia Civil, que tiene su destacamento en Marín, decidieron organizar un acto conjunto, que incluyó una misa en la iglesia parroquial de San Martiño y ágape posterior en el cercano bar O Muíño. A la ceremonia acudieron alrededor de una veintena de agentes en activo de ambos cuerpos, además de otros ya jubilados, familiares y amigos. El Concello de Bueu estuvo representado por su concejal de Relacións Institucionais, Fidel Castro. Entre las autoridades presentes estaba también la jueza de paz del municipio, Pepa Celard. La intención de la Policía y la Guardia Civil es mantener este tipo de celebración conjunta como manera de confraternizar.

Tras dos años de ausencia, regresaron a Moaña los actos de la Guardia Civil, de lo que se alegraba ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Ezequiel Fernández (PSOE) que acudió en compañía de Salvador Meira, también socialista. El sermón en la iglesia del Carmen del párroco José Luis Muñiz, estuvo dirigido a elogiar el trabajo de la benemérita, a que hay que entender su trabajo y finalizó su intervención con vítores ala Guardia Civil, Moaña y España. Hubo una nutrida representación del PP. El acto sirvió también para la presentación del nuevo sargento, Freijanes Martínez.