La comarca de O Morrazo pasó la noche en vela. Miles de vecinos se reunieron en torno al fuego en todos los barrios y lugares de la comarca para compartir una tradición ancestral que como es habitual se suele acompañar de sardinas asadas o de chorizos. Las fogatas de mayor tamaño y más concurridas se volvieron a ubicar en el entorno de las playas y las sardinas grandes aparecieron en abundancia ayer en los mercados, con buenos precios. La caja de 12-14 kilos se vendió en la lonja entre 100 y 125 euros.

En Cangas cientos de personas saltaron el fuego en la playa de Rodeira. Los arenales de Areamilla o de Vilariño contaron también con fuegos de gran tamaño. Los más pequeñas se sucedieron en playas de Aldán como Areacova o Francón. Además, colectivos vecinales hicieron sus fiestas en distintos barrios. Antes de caer la noche ya había hogueras en los barrios y Protección Civil tuvo que acudir a sofocar un incedio que se declaró en el monte, en San Cosme, detrás de la capilla, en donde ardieron 3.200 metros cuadrados.

En Moaña las hogueras vecinales más grandes fueron la de Domaio, organizada por O Monte Faro y que contó con la charanga Moita Marcha y la de Tirán que contó con gaiteiros, una queimada y la actuación del Mago Adry.

Un punto neurálgico en Moaña es la calle Daniel Castelao, que estuvo parcialmente cortada con la actuación del Grupo Ámbar. La gran hoguera se prendió en la rampa de acceso al mar. En la entrada de la isla de Samertolaméu también se reunieron muchos vecinos para disfrutar de un fuego de gran tamaño.

En Bueu la "Noite Meiga" contó con hogueras grandes en las playas de Mourisca, Ancoradouro, Tuia y Banda do Río, así como en los parques de Xexide y de A Estacada.

Las gaitas y música tradicional fueron otra de las constantes en casi todas las hogueras, aunque muchos jóvenes optaron también por los ritmos electrónicos que sonaron hasta esta misma mañana. El agua perfumada con las hierbas tradicionales de San Juan será la mejor ayuda para combatir la resaca en la jornada festiva de hoy.