La solidaridad es, de momento, uno de los pocos antídotos que se conocen contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica. Y ayer los vecinos de O Morrazo volvieron a demostrar que no le faltan dosis para luchar contra esa rara enfermedad neurodegenerativa por la que la ciencia y la medicina avanzan con mayor lentitud de la que desean los afectados y sus familias. Pero el respaldo social es decidido, y una marea naranja de centenares de personas recorrieron, andando o corriendo, el tramo comprendido entre la Casa da Cultura y el entorno de O Salgueirón, o se echaron al mar entre Ojea y Rodeira para mojarse por la causa. Los actos organizados en Cangas por la asociación Agaela fueron un éxito en una jornada donde la meteorología también puso de su parte.

"La ELA dificulta hablar, comer, respirar... Pero cada día es un nuevo día", había proclamado Tino Guimeráns, uno de los dos morracenses diagnosticados de ELA y artífice destacado en esta pelea por ganarle terreno a la dolencia. Y a golpe de piernas y brazos, ayer se dio otro paso adelante con una simbólica colaboración económica de cinco euros por cada camiseta, pero sobre todo por el testimonio colectivo de que "xuntos podemos coa ELA", como sugiere su eslogan.

Concello de Cangas, los clubes Náutico Rodeira, Atletismo Morrazo y Vila de Cangas y muchos voluntarios contribuyeron al éxito de la iniciativa con medios humanos y materiales, y la campeona de paratriatlón Susana Rodríguez Gacio pregonó de palabra y con su ejemplo una gran jornada solidaria.