Las 12 banderas azules que lucirán este verano en otras tantas playas de la comarca de O Morrazo que conjugan la calidad de sus aguas con el respeto al entorno y la dotación de servicios fueron recogidas ayer por los representantes municipales de Cangas, Moaña y Bueu, de manos del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Los tres concellos aún esperarán casi un mes para izarlas, a finales de junio, y dedicarán este tiempo a reforzar los servicios en todos los arenales, de forma coordinada, con el fin de poner en valor este potencial y su atractivo turístico. Después de la festividad de San Xoán, Cangas lucirá sus distintivos en Areabrava, Nerga, Menduíña, Melide, Areamilla, Liméns y Rodeira, todos los que solicitó, y Bueu repite con cuatro galardones en Area de Bon, Portomaior, Lagos y Lapamán, mientras Moaña recupera la enseña en la playa de O Con, que había perdido con la anterior Corporación.

Con tal reconocimiento de la calidad de su litoral, el trabajo se centra ahora en mantener esas condiciones y reforzar servicios, "de forma mancomunada, cando sexa posible", alientan desde los concellos. La limpieza es una de esas prioridades y para ello dispondrán de una nueva máquina limpiaplayas que cederá la Diputación. El alcalde de Bueu y presidente de la Mancomunidade, Félix Juncal, ya firmó la solicitud de cesión, que está garantizada verbalmente, y los tres concellos fijarán un calendario de uso durante la temporada estival. Cangas y Bueu cuentan, a mayores, con su propia maquinaria específica, pero también con más playas que atender. "Faremos un reparto equitativo", señala la concejala de Obras e Servizos de Cangas, Mercedes Giráldez, que apuesta por un salto de calidad en la infraestructura turística ligada al medio ambiente. Además de las 12 playas, los puertos deportivos de Moaña y Cangas repiten con este distintivo de calidad; el sendero de Donón y la ruta de senderismo de Cabo Udra también mantienen su estatus dentro de la Red de Senderos Azules; y el Aula da Natureza de Cabo Udra conserva este reconocimiento desde su apertura.

Aunque desde posiciones políticas distintas, existe coincidencia entre las administraciones a la hora de valorar el potencial de las banderas azules. Feijóo calificó el acto de ayer como "una fiesta de la autoestima, del orgullo de ser gallegos y del trabajo bien hecho", y desde los concellos apuntan en la misma dirección, abogando por conjugar el respeto al medio ambiente y la calidad de la atención para superar este año la cifra de visitantes, aunque primando la apuesta por la calidad y la sostenibilidad, no por el turismo de masas.

Con esa misma filosofía, la limpieza de playas será manual en los arenales más recónditos o con especiales valores naturales, como son los casos de Barra, Viñó o Melide, en la parroquia de O Hío. La retirada de residuos se facilitará con la ayuda de un quad que el Concello tiene en proceso de licitación y está previsto que entre en servicio a principios de julio, al igual que una máquina de limpieza viaria, ambas financiadas por la Diputación.

La accesibilidad es otro de los ejes de actuación. Los operarios de Cangas trabajan en las últimas semanas en la mejora de los accesos a las playas con la dotación o sustitución de rampas para personas con problemas de movilidad, y también el desbroce del entorno. En los próximos días comenzará la señalización viaria con reserva de espacios para discapacitados.