Los percebeiros de la Cofradía de Cangas iniciaron esta semana la campaña en las islas Cíes, en donde permanecerán durante todo el verano para retornar después en otoño a la costa da Vela en donde suelen trabajar a lo largo del invierno, más protegidos aunque siempre en peligrosas rompientes.

El percebe de las islas es de gran calidad y de fama reconocida y aunque las cuotas que se pusieron sobre las bandejas de la lonja para la subasta fueron de primera calidad, los precios no pasaron de los 85 euros el kilo. El primer día de subasta de percebe de Cíes en Cangas, el precio máximo fueron 85 euros el kilo y el mínimo, aunque solo fue un lote, se comercializó a 42. En total se pusieron a la venta unos 150 kilos. Los percebeiros acordaron no coger todo el cupo de 4 kilos y retornaron a tierra con 3 por marinero.

Los precios han ido en descenso a lo largo de la semana. El martes, la subasta se resolvió con un máximo de 81 euros el kilo y un mínimo de 42,50, también con el mismo cupo de 3 kilos por marinero. Y ayer el precio cayó a 69 euros el kilo, el más caro; y a 30 el mínimo.

El sector acordó no acudir hoy a faenar. Ayer el mar ya no estaba igual que los dos primeros días de la semana y se hizo difícil trabajar.

El sector del percebe, quizás porque es un marisco considerado de lujo, es uno de los que más padece la crisis económica y los lotes no se venden como antes, cuando se pagaban cantidades astronómicas para colocar el molusco de Cangas en los mejores restaurantes de la capital de España o de Barcelona.

La Cofradía de Cangas dispone de un plan de explotación del percebe que funciona extraordinariamente bien y del que viven unos 50 marineros, los cuales se han ido profesionalizando y cuidando un recurso que es uno de los pilares económicos del sector de bajura en este puerto. Hay que recordar que la Cofradía también patentó la marca percebe de Cíes, al igual que la navalla de Cíes, para darle más valor a este producto ya de por sí bueno. La marca aún no se comercializa, pendiente de completar la línea de trazabilidad con los compradores.