La lluvia no fue suficiente para parar la manifestación convocada ayer por los alcaldes de O Morrazo en representación de las Corporaciones de Bueu, Cangas, Marín, Moaña y Vilaboa. Al final más de 2.500 personas se dieron cita en la Rotonda do Gordo para, una vez unidos con la marcha llegada desde Moaña, recorrer el casco urbano de Cangas con silbatos, bocinas y, cuando era necesario, paraguas. El tiempo no animó a los cánticos, pero sí que se escucharon algunos de rigor contra NCG y reclamando que los ahorradores con su dinero atrapado en las participaciones preferentes u obligaciones subordinadas recuperen su dinero de forma íntegra, rechazando la quita aprobada en el Congreso de los Diputados. "Xa estamos fartos, queremos os nosos cartos", "Nos a traballar e eles a roubar" o el clásico "No nos moverán" fueron algunos de los gritos que se escucharon.
La marcha tenía una fuerte carga simbólica, no solo porque estaba convocada por regidores de distintos partidos políticos, sino porque plataformas de toda Galicia llegaron a una comarca en la que se gestó el primer colectivo de afectados "e onde fai 16 meses comezamos a reivindicar o que nos pertence", explicaban desde el Palco da Música los portavoces de los afectados al final de la marcha.
Al final acudieron integrantes de las plataformas de -Vigo-Val Miñor, Baixo Miño, Pontevedra- Marín, Redondela, A Estrada, O Condado-Paradanta, Santiago, O Salnés y Umia- que llegaron a la villa en una decena de autobuses.
La manifestación, convocada bajo el lema "O Morrazo esixe solucións", partió pasadas las 20.00 horas. La encabezaban los regidores de la comarca a los que se unieron los alcaldes de Pontevedra, Soutomaior y Redondela.
La cabecera, seguida por afectados y vecinos de Cangas, Bueu y Moaña en su mayor parte, avanzó con rapidez ante las fuertes lluvias del momento inicial. Pero una parte de los integrantes de la plataforma de O Morrazo quedaron rezagados entre la nube de paraguas esperando por otros colectivos que todavía estaban llegando en autobús. Finalmente se produjo un parón a la altura de la casa del Concello, sobre las 20.45 horas, para que la marea de personas se uniese de nuevo. Cuando los alcaldes y ediles de los distintos grupos políticos -prácticamente todos los concejales de la comarca acudieron a la cita, así como los diputados de la zona- alcanzaron el palco de la Alameda Vella, la cola de la manifestación, marcada por las camisetas rojas de los afectados de O Salnés, todavía se encontraba en la intersección entre la PO-551 y la Avenida de Marín.
Sobre las 21.15 horas llegaron los más rezagados a una alameda que se quedaba pequeña para acoger a la gente.
Entremedias, apenas incidentes a destacar. El ruido de las bocinas y silbatos era ensordecedor, hasta el punto de que muchos afectados acudieron con tapones para los oídos. A la altura de la sucursal del paseo Eugenio Sequeiros una docena de manifestantes locales tiraron huevos contra la fachada y las ventanas de la oficina en el que pasó por ser el único incidente fuera de la normalidad.
Una vez en el palco, los distintos colectivos hicieron un círculo con sus pancartas y los integrantes de la Escola de Teatro mostraron su solidaridad con una pequeña representación en la que un banquero le dice a una clienta que no puede retirar su dinero.
Uno de los discursos más duros fue el entonado por el alcalde de Cangas, José Enrique Sotelo, en representación de sus compañeros de la comarca. "Máis de 60 millóns de euros e 3.300 afectados amosan a dimensión deste problema na nosa comarca, por iso esiximos solucións".
Sufriendo una afonía a mitad del discurso el regidor anfitrión apeló a "manter viva a reivindicación para que se devolva o que co amparo da Lei lle roubaron a miles de galegos. A pesar de que transcurriu ano e medio que ninguén pense que nos imos a esquecer".
En materia de soluciones, Sotelo pidió "que continúen as arbitraxes con criterios claros e para todos. Que se eliminen as taxas xudiciais para estes casos" y que el FROB obligue al banco a dedicar los beneficios a devolver "o que roubaron". Finalmente, el alcalde, pidió "que se tomen accións xudiciais contra os responsables desta burda estafa".
Curros Enríquez
Antes, Chema Alfaro, de la plataforma morracense, leyó un manifiesto en el que pidió a la clase política que, más allá de las protestas, extiendan este acuerdo entre fuerzas a nivel autonómico para presionar a los gobiernos gallego y estatal. "Vós tedes máis posibilidades de chegar alí onde nós non podemos. Podedes facervos escoitar onde se toman as decisións e intentar revogalas". Y es que para los afectados la pelota ya "está no tellado" de los políticos. Acabó entonando el poema "O Maio", de Curros Enríquez, "porque se este país permitiu esta estafa e non é quen de solucionala, Galicia non cambiou desde ese poema".
