La Asociación Cabalar Monte Gagán inaugura esta tarde las obras que iniciaron en el mes de enero para intentar acabar con el conflicto de intereses entre dicho colectivo y las comunidades de montes de Meira (Moaña), San Adrián (Vilaboa) y de Santomé de Piñeiro (Marín). La cita será a las 20.00 horas en la Casa das Augas de Santomé, ubicada en Chan de Gagán.

Estas obras consisten en el cerco de cinco zonas de monte comunal, que en total suman más de 60 hectáreas de superficie, con un perímetro de casi 8.000 metros. Dos de estas áreas pertenecen al municipio de Marín, otras dos a la parroquia moañesa de Meira y la última al ayuntamiento de Vilaboa. Así, los animales pueden ser desplazados de un lugar a otro en función de la climatología y de los trabajos de los comuneros.

La intención es conseguir tener a los caballos salvajes controlados y suprimir los riesgos que esta ganadería desregulada supone para el tráfico y para las explotaciones forestales agrícolas. Así, ya no sería necesaria la utilización de elementos como los cepos, que desde la Asociación Cabalar catalogan como "inadmisible".

Los miembros de este colectivo también aseguran que el cercado permite la libre circulación de la fauna menor, "potenciando unha xestión racional que faga compatibles as políticas de repoboación forestal das comunidades de montes coa recuperación do cabalo galego nas mellores condicións posibles". Los trabajos supusieron una inversión de 150.000 euros, financiados con aportaciones de la Consellería de Medio Rural y de la Concellería de Medio Ambiente de Moaña. Así como con fondos de la propia asociación y de las comunidades de montes. Por otra parte, la asociación celebra este sábado y domingo la rapa das bestas en Chan de Arquiña.