Tal y como se preveía, los arquitectos técnicos de Cangas presentaron las alegaciones a la ordenanza fiscal que regula el Impuesto de Construcción, Instalaciones y Obras (ICIO). Afirman que es falso que el tributo suba sólo el IPC (4,95), ya que el incremento real previsto para 2009 es de un 10,26%. Estas alegaciones suponen reacciones del sector de la construcción de Cangas no sólo a medidas adoptadas por el gobierno tripartito, sino por la Xunta. Y es que la Asociación de Promotores y Empresarios de la Construcción (APROECO) encontró un desequilibrio importante entre las Normas Subsidiarias de Cangas y la Ley del Hábitat. La puesta en marcha de la nueva ley supone perder volumen de edificación, así que la intención de este colectivo es solicitar una modificación puntual de las actuales normas de planeamiento de Cangas, que tendría que contar con el visto bueno de la Consellería de Política Territorial y Obras Públicas, que tiene todavía pendiente de informar (dos años después) la que planteó el Concello y que está relacionada con Massó.

Otros cálculos

Los cálculos que realizan los arquitectos técnicos de Cangas son bien diferentes a los hechos por el gobierno tripartito. Afirman que el porcentaje correspondiente al impuesto pasa del 3,05% al 3,20% y el porcentaje que corresponde a la tasa pasa del 0,56% al 0,60% y el módulo adoptado por el Concello del coste por metro cuadrado para uso de vivienda se incrementa de un 664,44 euros metro cuadrado a 697 euros metro cuadrado. De ahí que sitúen la subida real en un 10,26. Afirma este colectivo que los módulos deberían ajustarse a los diferentes usos y que existe justificación alguna para establecer los valores de construcción que figuran en el anexo de la ordenanza.

Anulación

Los arquitectos técnicos llaman la atención sobre la recaudación desde el año 2005 aplicando la subida impositiva en una vivienda unifamiliar tipo de 100 metros cuadrados de semisótano, 140 de vivienda y 70 de trastero y bajo cubierta. Aseguran que entre 2005 y 2009 la previsión de recaudación por tasas e impuestos para la construcción de una vivienda unifamiliar es de 189.09%, con el agravante de la carencia de servicios municipales que tienen las edificaciones unifamiliares que se ubican en los núcleos rurales.

Este colectivo pide la anulación de la tasa por considerar "excesivo y abusivo el incremento de carga impositiva con la que está gravada a vivenda en xeral e, concretamente, a vivenda unifamiliar no rural".