El Concello de Lalín inició ayer una nueva campaña de erradicación de vertederos ilegales en el rural. Los concejales Miguel Medela y Celia Alonso asistieron en la mañana de ayer al comienzo de los trabajos de eliminación de uno de estos depósitos no autorizados en Goiás, en donde se acumulaban de manera irregular colchones, plásticos, hierros y diferente material agrícola. Tras las tareas de limpieza desarrolladas en esta parroquia, el Concello hará lo propio en los días siguientes con otros vertederos localizados en Erbo, A Xesta, Doade, Méixome, Cercio y Palmou.

Los materiales que se retiran son, mayoritariamente, desechos procedentes de viviendas y granjas, con componentes contaminantes, que deberían depositarse en los lugares y épocas habilitadas para la retirada de plásticos agrícolas. También se incide en la necesidad de avisar al Punto Limpio para la eliminación de otro tipo de residuos y situarlos en los lugares indicados para que pasen a recogerlos. Cabe reseñar que la ordenanza de medio ambiente del Concello de Lalín contempla sanciones de hasta 3.000 euros para los autores de este tipo de depósitos ilegales.

Medela y Alonso inciden en "el daño inasumible que provocan este tipo de vertidos, tanto al medio ambiente, como a la propia ciudadanía, puesto que somos todos los que afrontamos los enormes costes de su eliminación". Por eso, apelan una vez más "a la sensibilización y a la colaboración ciudadana para acabar con esta lacra y dar con los insensatos que contaminan nuestra naturaleza". Dentro del proceso iniciado, ya se han erradicado vertederos en lugares como Belelle y Catasós -en la parroquia homónima-, Zobra, Filgueira o A Borralla (Prado).