La previsión de lluvias para la jornada de ayer acabó dejando paso, en realidad, a la primera ola de frío polar que se cierne sobre la comarca y que seguirá al menos hasta el domingo. El desplome de temperaturas convirtió a Lalín y a Rodeiro en los municipios con el mercurio más bajo de toda la provincia: 5,7 y 3,6 grados bajo cero, respectivamente. Noviembre termina casi como empezó: con cielos despejados que durante las horas de luz permitió, en algunas jornadas como la del día 19, alcanzar los 19,4 grados de máxima, y que durante las noches adelantan unas heladas más típicas de diciembre y enero. De hecho, según los datos que maneja Meteogalicia, en la estación de Mouriscade se registran hasta 12 días con heladas, mientras que en la estación de la Serra do Faro, en Rodeiro, se contabiliza tan sólo uno.
En este sentido, son más significativas las horas de frío, que son en las que los termómetros marcan siete grados o menos. La estación urbana de Lalín carece, de momento, de este dato, pero en la de Mouriscade se contabilizan a lo largo de noviembre hasta 275,51 horas por debajo de ese valor, es decir, el equivalente a 11 días y medio. La situación es casi idéntica en otra estación donde el clima es mucho más benigno, la cruceña de Camanzo, donde hubo hasta 215 horas de frío (o sea, 8,9 días).
Noviembre también se suma a la larga lista de meses que desde el otoño pasado destacan porque los paraguas brillaron por su ausencia: si en 2016, ya de por sí atípico, en la estación forcaricense de Pereira se recogieron 225,6 litros por metro cuadrado (l/m2), en el mes que ayer terminó la cifra cayó a los 116,2. Si en Pereira, la zona más lluviosa de las comarcas, la sequía se hace notar, en el resto de Deza y Tabeirós-Montes la situación es aún más acuciante. En el casco urbano de Lalín se recogieron, durante todo el mes, 74,7 milímetros de precipitaciones, repartidos en tan sólo nueve jornadas: de los días 2 al 4, así como el 7, el 9, el 12 y del 22 al 24. Pero es que sólo en tres jornadas cayeron lluvias considerables, con más de 10 l/m2. El volumen de precipitaciones es aún inferior en la Serra do Faro, con 61,5 milímetros, mientras que en Camanzo se queda en los 68,5 y en Mouriscade alcanza los 73,6.
Ya de cara al fin de semana que arranca hoy, Meteogalicia baraja unas mínimas en Lalín de 4 grados bajo cero tanto mañana como pasado, mientras que las máximas se moverán en torno a los ocho. Para garantizar el buen estado de las carreteras durante todo el temporal de frío, desde la Diputación ya desde primera hora de la mañana de ayer se desplazaron brigadas a una veintena de carretera provinciales tanto en Deza como en Tabeirós-Terra de Montes. Los operarios se encargaron de esparcir sal en dos carreteras de Lalín: la que comunica el casco urbano con Botos y Gresande, y la que enlaza Prado y Vilatuxe. El municipio de Dozón hubo que intervenir en la pista que une el casco urbano de O Castro con el municipio de O Irixo así como la que, también desde O Castro, va a Dozón, Saa y A Rocha. Las brigadas, en Rodeiro, esparcieron sal en la vías del casco urbano a Vilela y a Oseira, así como la de Negrelos a Pedroso, de Portela a Antas de Ulla y de Portela a Pescoso.
Ya en Tabeirós-Terra de Montes, se intervino en la vía de A Estrada a Forcarei, y dentro de este municipio, en las de Cachafeiro-Silleda; Pereira-Aciveiro-Ramal convento; Soutelo-Covas y Soutelo-Ratel. En Cerdedo se desplazaron a los viales que comunican con A Portela; con Castro e Ireza y, por último, con Santo Domingo.
