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El juzgado busca a los dueños de las parcelas que quemó Gustavo V.C.

Al agoladés se le acusa de prender fuego en 17,2 hectáreas, repartidas en 111 fincas

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Lalín continúa con las diligencias previas de cara a enjuiciar a Gustavo V.C. como presunto autor de 16 incendios en varios puntos de Agolada así como de Lalín. Las salas de O Regueiriño enviaron al Concello de Lalín un escrito para que se exponga en su tablón de anuncios, y en el que figuran las áreas afectadas por estos fuegos. Con esta decisión, el juzgado convoca a personarse ante la sala a todos los propietarios de dichas fincas, que se consideren perjudicados por dichos incendios. La relación está expuesta durante 15 días hábiles, a contar desde este lunes, día 6.

La superficie afectada por las llamas alcanza las 17,2 hectáreas, repartidas en 111 parcelas. Los daños oscilan entre las 0,04 y 8,78 hectáreas quemadas en cada finca. Las parcelas afectadas, de igual modo, muestran una superficie muy variable, ya que en la lista se encuentran fincas desde tan sólo 0,81 metros cuadrados hasta las que alcanzan los 15.229. Por municipios, de las 111 fincas afectadas, 96 se ubican en el municipio de Agolada, de modo que las 15 restantes están en Lalín (donde ardieron, en concreto, 4,27 hectáreas, frente a las 12,95 de Agolada).

Los incendios se produjeron durante la segunda quincena del mes de agosto. Gustavo V.C. fue detenido a principios de septiembre como presunto autor de los hechos y teniendo como base el testimonio tanto de vecinos como los seguimientos que hacía la Guardia Civil de este pirómano, que ya en 2013 fue condenado a prisión por hechos similares. Además, en su vehículo se había colocado un dispositivo que permitió localizarlo por GPS en las zonas donde se producían incendios poco después de haber pasado el vehículo por las mismas. La Audiencia Provincial ratificó dos autos del juzgado lalinense, del 4 y del 26 de septiembre, ratifica su continuidad en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Desestimó el recurso del presunto autor, que proponía ingresar en un centro psiquiátrico. Ya en 2013 se le cambió la pena de prisión por una medida similar, pero ésta no sirvió para controlar sus impulsos de piromanía.

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