La Orquesta de Cámara Galega cosechó ayer un rotundo éxito durante su actuación en el Pazo de Liñares de Lalín. Los sonidos de la formación que dirige Rogelio Groba Otero devolvieron por unas horas el esplendor al recinto del siglo XVII, época en la que también vio la luz la música de cámara. Sin embargo, la actuación en la que se estrenó la pieza Alba de Gloria de Rogelio Groba estuvo impregnada de la modernidad que su hijo suele darle a todos los conciertos en aras de popularizar una música tradicionalmente asociada a las élites. El público abarrotó el improvisado patio de butacas organizado en el interiror de la construcción pacega dezana y disfrutó de repertorio variado que hizo ameno el evento artístico.

Lalín tuvo el honor de ser la primera localidad de Galicia donde sonó la composición dedicada a Castelao por parte de Groba, a partir del famoso discurso del insigne galleguista en Buenos Aires con motivo del Día da Patria. Piezas como Alborada de gloria, Na catedral, Sen ti, alegrías e tristuras, Etnografía panteísta, Cortexo fúnebre, Oda aos inmortais y Enerxía colectiva llenaron de lo que Groba siempre llama "música para el espíritu" la tarde-noche de Liñares de unas notas cargadas de emotividad, que consiguieron arrancar el aplauso de una auditorio entregado. Groba hizo gala de su don de gentes durante todo el concierto, interactuando con los presentes e invitándolos a bailar al son de piezas procedentes de Brasil. La actuación se completó con obras de Purcell, Holst o Haendel, que ayudaron a transportar a los presentes a una época donde la cuerda tuvo una preeminencia absoluta dentro de la música de estilo barroco.

La Orquesta de Cámara Galega continuará su periplo con la obra de Groba dedicada a Castelao en próximas fechas bajo la organización de la Deputación de Pontevedra. Así, está previsto que actúe el próximo sábado en la Igrexa de Vistalegre de Vilagarcía (21.00 horas) y el lunes 8 de agosto, a la misma hora, en el Auditorio Municipal de Ponteareas.