La mayoría de los deportes viven bajo el reinado del todopoderoso fútbol, aún así, cada disciplina se las arregla para continuar con su legado y tradición. Como la petanca, que desde su nacimiento, allá a principios del siglo XX en Francia, continúa enganchando a cada vez más jugadores por distintas partes del mundo, como también de la comarca de Deza.
En ese trabajo colabora desde cada persona que lo practica de forma altruista, hasta cada club federado que lo defiende y promociona. Como es el caso del Clube Petanca Bandeira, que desde su fundación, hace alrededor de 35 años, continúa luchando para que su expansión prosiga tanto por Deza como por la comunidad gallega. En Bandeira la petanca se ha convertido más que en un deporte, más bien es una tradición que se ha instaurado por completo. Pequeños y mayores viven a diario las partidas celebradas en las canchas próximas a la Plaza Juan Salgueiro, la mayoría han jugado o han visto jugar una partida alguna vez.
Este club es uno de los pocos existentes en Galicia, y el único, según Juan Salgueiro Penoucos, miembro de la directiva de la entidad en calidad de tesorero, que se encuentra federado fuera de Vigo. Un total de 25 licencias son las que conforman el club, donde se pueden encontrar jugadores desde 12 años hasta alguno que supera las 80 primaveras. Como toda buena tradición, viene de algún lado, y la petanca, según manifiesta Salgueiro, proviene de su país de origen, Francia. En concreto, de los retornados emigrantes que aprendieron a jugar en los descansos de sus altas jornadas laborales en el país galo, ya que allí el juego estaba muy extendido. En su vuelta a la localidad silledense no quisieron dejar en el olvido un deporte que los acompañó durante tanto tiempo en el exilio francés, por lo tanto prosiguieron practicándolo además de enseñar a los vecinos las reglas y formas de jugar.
Así es como, a finales de los años 70 se creó el club con la misión de jugar campeonatos federados. Uno de sus fundadores, Jesús Otero, profesor silledense, fue uno de los impulsores del deporte, estableciendo incluso las bases de la entidad que en la actualidad es presidida por Luis Espiño.
Tras todos estos años jugando, Salgueiro reconoce que le gustaría que se formase una liga comarcal en la que participaran diferentes localidades de municipios colindantes. Sostiene que lugares como Lalín, donde hace apenas un año se estableció una cancha de petanca en el Parque de Loriga, Silleda, Lamela o Escuadro podrían tener perfectamente jugadores que accediesen a formar parte de la iniciativa. De hecho, el tesorero manifiesta que ya había hablado de este proyecto con el dueño del Bar Suso de la parroquia lalinense de Donramiro, pero aclara que todavía no se han sentado a trabajar profundamente en ello.
Por otra parte, el Clube Petanca Bandeira realiza un torneo anual durante la Festa da Empanada, un open que continúa acercando a los vecinos este deporte. Equipos de Portugal y de diferentes puntos de la comunidad suelen acudir a este campeonato que hace años llegó a ser federado.
