Y de la misma forma que es casi anecdótico el volumen de habitantes que residen fuera de las zonas donde se concentra la población, sean aldeas o cascos urbanos, también lo es el volumen de viviendas que se construyeron al margen de los núcleos, aprovechando precisamente su vinculación a una actividad ganadera o una situación en la que se carecía de norma urbanística.

Así, en total hay 2.118 viviendas construidas fuera de los núcleos, según los datos de la Diputación. El volumen es especialmente importante en Lalín, con 716 casos (es un 8% de las 8.172 viviendas de que dispone), y Forcarei, con 541 sobre un total de 2.070. Silleda ocupa el tercer lugar, con 251 viviendas construidas en zonas aisladas, por así decirlo, y que suponen el 6,4% del total, 3.866. A Estrada, el municipio más grande en población, es sin embargo uno de los que tiene ésta más concentrada, pues dispone tan sólo de 144 viviendas fuera de núcleos, frente a un total de 7.635 (es el 1,8%). La cifra de A Estrada es similar a la de Agolada, con 133 viviendas fuera de núcleos y un global de 1.573, casi la quinta parte de las estradenses. Rodeiro aporta 113, mientras que en Cerdedo se contabilizan 107 y en Dozón, 65.