La delegación de Cáritas Diocesana en Silleda se encuentra ya inmersa en la organización de su segunda "Dulce Navidad" una iniciativa solidaria con la que espera recaudar fondos con los que seguir atendiendo las necesidades de las familias que tienen menos recursos del municipio. Tal y como explica el párroco de Silleda y también coordinador de Cáritas en la zona de Deza y Tabeirós-Montes, José Pérez Barreiro, del 18 al 20 de diciembre se instalará una carpa en la Praza da Igrexa del casco urbano de Trasdeza. En ella los vecinos de las parroquias pondrán a la venta de forma desinteresada sus licores, rosquillas, dulces y demás delicias caseras, con el ánimo de recaudar dinero para los que más precisan durante esas fechas tan señaladas. La organización confía en que durante el fin de semana colaboren también parte, sino todas, las asociaciones del municipio, tal y como ya ocurrió durante la edición del año pasado. En 2014 se recaudaron en torno a 3.000 euros. El párroco recuerda que la iniciativa está abierta a todos los vecinos del municipio que deseen colaborar aportando algunas de sus creaciones gastronómicas.
Al margen de ese fin de semana previo a Nochebuena en el que se podrán adquirir todo tipo de delicias con fines benéficos, Cáritas de Silleda organiza todos los primeros domingos de mes una colecta que es la que realmente permite seguir adelante con sus iniciativas solidarias. A día de hoy, "nos encargamos de 16 familias del municipio, al margen de ayudas puntuales que podamos prestarle a otros vecinos", explica el párroco trasdezanos.
Acogida de refugiados
Cáritas Silleda también está muy pendiente de cómo se desarrollan los trámites políticos para la acogida de refugiados sirios. El pasado mes de septiembre, el papa Francisco I hacía un llamamiento a todas las parroquias europeas para que se sumasen a la iniciativa. Cáritas Silleda está a la expectativa de lo que se decida desde los gobiernos civiles. Semanas atrás Cáritas celebró hubo una reunión específica para abordar, entre otras cuestiones, la disponibilidad de inmuebles para dar alojamientos a las familias que huyen de la guerra. En el caso de Silleda, el párroco José Pérez recuerda que se dispone del albergue de peregrinos Santa Eulalia, que aunque actualmente funciona como espacio para el descanso y la pernoctación de romeros, en último caso sí puede utilizarse para dar cabida a estas familias. "En él caben entre 40 y 50 personas", calcula. Está equipado con todo lo necesario para cubrir las necesidades básicas. Hay que recordar que desde Cáritas Silleda se tiene una dilatada experiencia en cuanto a la acogida y labor de integración de los emigrantes que deciden instalarse en estas tierras.
