El gobierno lalinense asegura que nada puede hacer por intervenir en la calle X y adecentar este espacio que comunica la Praza da Igrexa con la rúa González Taboada. El motivo no es otro que esta zona de tránsito es de titularidad privada y, por tanto, el Concello incurriría en una ilegalidad si destinase dinero público a su mejora.

Así lo recalca el concejal de Obras e Servizos Municipais, Camilo González Bodaño, quien alega asimismo que el camino de servicio de la calle X es privado "según sentencias judiciales firmes que así lo declararon". Añade que la administración local tampoco podría hacer nada para adecuar esta zona aunque contase con los preceptivos permisos de los propietarios. Con estas palabras replica a los socialistas, quienes, días atrás instaron al Concello a tomar medidas y adecentar esta calle. Bodaño manifiesta que la obtención de esta servidumbre -camino de servicio- por parte del ayuntamiento, debidamente urbanizado, está supeditada al desarrollo del Área de Reparto (AR) 25 del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). Añade que este desarrollo había sido planeado por los particulares, pero luego paralizado por ellos mismos "supongo, que debido a la actual coyuntura económica".

El edil propone al candidato a la Alcaldía del PSOE, Nicolás González Casares, que se informe antes de realizar un planteamiento como este. "No da pie con bola últimamente, pues en las últimas semanas también insinuó que era el Concello el que hacía las obras de arreglo de las calles, cuando lo hace Gas Natural, por citar solo una de las meteduras de pata últimas de más calibre". Cierto es que el estado de la calle X es deplorable desde hace años, con vegetación invadiendo el paso entre la principal plaza del centro de la villa y González Taboada. En algunas zonas también se acumula basura y la iluminación es más que deficiente.

En otro orden de cosas, González Bodaño sí muestra la posición favorable del ayuntamiento para atender las reivindicaciones de los vecinos del barrio de A Cacharela, relativas a la mejora de un acceso que comunica las calles Bos Aires con Rosalía de Castro. El concejal avanzó ayer que prevé reunirse con técnicos municipales y representantes del colectivo vecinal "para analizar la problemática y luego adoptar las resoluciones que sean necesarias y viables".

El pasado sábado en torno a una treintena de vecinos se concentraron en A Cacharela para instar al Concello a reparar este acceso, que se toma a través de una empinadas escaleras construidas hace décadas. En su parte superior -conexión con Bos Aires- existe un riesgo de accidentes por el estado del firme, entre otros problemas.