La 30ª Mostra de Teatro Internacional Cómico e Festivo de Cangas sube hoy el telón y no lo bajará hasta el próximo 7 de julio. El evento celebra, paralelamente, la novena edición de las Xornadas da Muller. El lunes 1 se dedicará a la carrera de la actriz Marisa Soto (Silleda 1955-Lebosende 1998), pionera en la escena y el audiovisual gallego en los años 80. El programa no se tocará, pese que el Concello de Silleda reconoció que extravió parte del legado de la actriz. No llegó a inventariarse y se perdieron los documentos anteriores a 2011. "Tiñamos previsto un acto máis elaborado, pero sen a documentación será unha actividade máis íntima. Falarán amigos e familiares da actriz", explica María Armesto, responsable de las Xornadas da Muller. Será a las 23.00 horas en Salasón.

El legado en cuestión consistía, básicamente, en libros procedentes de la biblioteca de la actriz, así como artículos y obras de teatro. Fue entregado en 2009 por la familia de Marisa Soto a la alcaldesa Paula Fernández Pena, que lo depositó en la Casa da Xuventude -en donde nació la actriz y a la que da nombre-, con la intención de ordenarlo y exponerlo en una vitrina. Pero el gobierno salido de la moción de censura de ese mismo año ordenó una limpieza en el centro juvenil y las cajas salieron del mismo sin que se sepa adónde fueron a parar ni si su contenido fue quemado, tirado a la basura o almacenado en algún lugar.

La propia familia se dirigió a Pena hace unos meses para pedirle los documentos con motivo del homenaje de Cangas. "Fue entonces cuando me acordé de que teníamos aquel material, fui a la Casa da Xuventude y ya no estaba. Me dijeron que lo habían retirado durante una limpieza -explica la regidora-. Pasamos quince días buscando y preguntando a trabajadores municipales, pero nadie sabe nada". Pena se disculpó por lo sucedido con una hermana de Marisa y le entregó toda la documentación que sobre la actriz había en el consistorio.

Compromiso por Galicia (CxG) exige la dimisión de la actual edil de Cultura por no dar explicaciones. Su responsable comarcal, el estradense Orlando Villamayor, califica la pérdida de "irresponsabilidad lamentable".