Los centros educativos de Deza y Tabeirós-Terra de Montes cuentan en el presente curso con 303 alumnos de procedencia extranjera, según los datos del IGE. Se trata de un número más bien modesto, pues supone solo el 4,02% de los 7.522 niños y jóvenes que se forman en los colegios e institutos de los concellos de la zona. No obstante, dicha cifra no ha dejado de crecer en los últimos años, pues estos 303 alumnos son casi un centenar más de los 207 que se contabilizaban cinco años atrás, en el ejercicio de 2007.
Este incremento se debe, en buena parte, al aumento de la emigración de retorno. El regreso de vecinos que en los años 70 y 80 se fueron a hacer las Américas y que vuelven a sus tierras de origen acompañados de sus hijos y nietos explica que, entre toda la comunidad escolar extranjera, predomine la del continente americano y, en concreto, la procedente de los países de habla hispana como Venezuela o Argentina. En los colegios e institutos de Deza estudian 128 chavales que nacieron al otro lado del charco, al igual que otros 15 de los centros de A Estrada y Forcarei (Cerdedo carece de alumnos extranjeros). Es decir, 143 en total, mientras que en 2007, procedían de América 101 alumnos de Deza y otros 21 de Tabeirós-Montes.
Lo mismo se puede decir de los estudiantes oriundos de otros países europeos. Alemania, Suiza y, en menor medida, Londres, son las ciudades en las que 75 alumnos de Deza y otros 19 de A Estrada y Forcarei tomaron el billete de regreso a la tierra que vio nacer a sus abuelos y padres. Pero también es cierto que en estas cifras se engloban chicos de ascendencia rumana y de otros países del este europeo. Sin embargo hay que destacar que apenas se nota el incremento de pupilos europeos, puesto que en 2007 se contaban, 67 en Deza y 16 en Tabeirós, es decir, 11 menos que los 94 actuales.
El motivo de la escolarización de alumnos africanos en las aulas de la zona es diferente al de los latinoamericanos y europeos. Si echamos la vista una década atrás, los concellos más grandes de las comarcas absorbieron un volumen considerable de mano de obra argelina y marroquí en obras públicas -como el Tren de Alta Velocidad- o en explotaciones avícolas, así como en empresas de construcción. Aunque desde la crisis mucha de esta población ha decidido regresar a sus países, en las escuelas de Deza continúan formándose 24 niños del continente africano, a los que se suman otros 30 de A Estrada. Aunque las cifras son más reducidas que en los dos anteriores casos, el número de jóvenes africanos en la comunidad escolar también ha crecido en el último lustro. En 2007 estaban matriculados solo 4 chicos en Deza y uno en A Estrada. Su incremento se produjo sobre todo en Lalín (que pasa de 1 a 10) en Vila de Cruces (de ninguno a 7) y en la capital estradense.
La comunidad asiática
Por último, la comunidad escolar asiática todavía es residual en los centros educativos de las dos comarcas, con solo 8 estudiantes en los concellos dezanos (6 en Lalín, 1 en Rodeiro y otro en Silleda) y 4 en A Estrada. Cinco años antes, había solo un alumno asiático en Lalín y otro en A Estrada.
El concierto didáctico de Odaiko abarrota el auditorio de Lalín - Los escolares del municipio de Lalín completaron el aforo del auditorio municipal, con motivo del espectáculo Odaiko nas escolas, el proyecto didáctica del grupo Odaiko Percussion Group. El grupo, con sede en Merza, ofrece en este proyecto un repaso por los instrumentos de percusión de varias culturas. Para ello, los cuatro integrantes de la formación invitan a los chavales a un viaje por la historia de la Humanidad y la relación de ésta con la música.
