La inminente reforma de Beiramar, entre la cofradía y la rotonda de las garzas, tiene un presupuesto y una subvención de unos 126.000 euros, procedentes de la Diputación. Y ahora el gobierno de O Grove, como se explicaba ayer, está en disposición de obtener otra aportación para la misma obra, ésta por valor de 101.000 euros, y otorgada por el Estado central.

La formalización de esta última ayuda se formalizará mañana en un pleno extraordinario de la Corporación, y Esquerda Unida ya avanza que va a votar a favor, al tiempo que reclamará que los 101.000 euros que el Concello tendrá a mayores sean invertidos en la mejora integral de la "deteriorada" plaza de O Corgo.

Los esquerdistas Juan Lamelas y José Antonio Otero defienden esta propuesta desde el convencimiento de que "este céntrico entorno presenta una mala imagen" e incluso de que su estado actual constituye "un peligro".

A su juicio, es preciso actuar urgentemente y reponer el pavimento de O Corgo, además de instalar bancos y otros elementos "que vuelvan a hacer de esta plaza el concurrido punto de encuentro y de juegos que fue en el pasado".

A la espera de acontecimientos, y de que se acepte su propuesta, los representantes de Esquerda Unida hacen otra reflexión, ésta mucho más crítica con el gobierno local. Y es que no comparten que para acometer el trámite de solicitud de la ayuda estatal sea preciso recurrir a un pleno extraordinario como el que va a celebrarse mañana, con el coste extra que esto supone para las arcas municipales.

Entienden los esquerdistas que "existió un error en la tramitación de la solicitud de la ayuda, por eso este asunto llega tarde y mal al pleno".

Lo que quieren decir es que tendría que haberse tratado con anterioridad -en una sesión de carácter ordinario-, recordando igualmente que "el órgano competente para la aprobación de este tipo de trámites suele ser el pleno y no la Alcaldía".