Teniendo en cuenta la insalubridad del agua del colegio de Carril, el Concello de Vilagarcía seguirá proporcionando agua embotellada a la comunidad escolar mientras no se alcance una solución, como viene haciendo desde el 27 de febrero, cuando los padres denunciaron la situación.

Además, el alcalde, Alberto Varela, reiteró ayer por la mañana vía telefónica la petición de una entrevista de carácter urgente con el conselleiro de Educación, con el que ya hablara de este asunto hace unos días. Al final de la mañana recibió la llamada del delegado de la Xunta, José Manuel Cores Tourís, y por la tarde del propio conselleiro de Educación.

El gobierno vilagarciano insiste en que el problema en el colegio de Carril no se trata de una cuestión de mero mantenimiento del centro, sino que "es necesaria una reposición total del sistema de fontanería en un centro en el que, en este aspecto, no se hizo ninguna actuación desde su construcción, hace más de treinta años. El gobierno municipal ya demostró a lo largo de este mandato su disposición a colaborar con Educación, como en el pabellón de Rubiáns o el comedor de O Piñeiriño, pero en este caso el problema de fondo es otro", defienden desde Ravella.