Unión Fenosa y el Concello de Vilagarcía habían anunciado que ayer iba a producirse un corte de luz en el centro de la ciudad, con el propósito de ejecutar diversas obras. Habían asegurado que tendría lugar entre las 9.00 y las 10.00 horas, y así fue.

Lo cierto es que del mismo modo que en otras ocasiones se alerta de los daños y perjuicios causados por los apagones, esta vez hay que alabar la concreción con la que tuvo lugar, y así lo destacaban diversos ciudadanos afectados, y sobre todo los titulares o empleados de negocios asentados en la zona de la ciudad afectada, como panaderías y pastelerías.

Es cierto que aunque estaba anunciado algunos ciudadanos no sabían de esa interrupción en el suministro eléctrico, de ahí que se mostraran sorprendidos e incluso irritados al quedarse sin luz en una mañana meteorológicamente tranquila como la de ayer, pues no acertaban a entender lo sucedido.

Pero los vilagarcianos que sí se habían enterado de que el apagón iba a producirse -FARO DE VIGO lo anunció el viernes- se mostraron satisfechos al constatar que se habían respetado escrupulosamente los plazos, incluso retomándose el suministro un par de minutos antes de las diez de la mañana, para satisfacción de quienes esperaban ansiosos que se hiciera la luz.

También es de destacar el hecho de que la interrupción en el suministro se limitara, aparentemente, a las zonas que se habían indicado previamente desde la compañía eléctrica.

Unión Fenosa, que pudo realizar así los trabajos de mantenimiento necesarios en la red del término municipal, había diseñado un plan para que el apagón afectara exclusivamente a diversas calles situada en la zona comprendida entre el mercado de abastos y la Praza de Galicia.

En concreto se interrumpió temporalmente el suministro en las calles Alexandre Bóveda, entre los números 2 y 20; Arcebispo Lago, en los inmuebles con números impares comprendidos entre el 1 y el 21; en los números 26 y 28 de la misma calle; en la Castelao; en el número 7 de la calle Xeral Pardiñas y en el 5 de la Plaza Doctor Carús.