El Ayuntamiento de Vilagarcía inicia mañana lunes los trámites para la construcción de la que será su segunda piscina. Se trata de una instalación que se ubicará también en Fontecarmoa, y que irá unida a la actual a través de un corredor climatizado.

La administración local explica que la junta local de gobierno aprobará mañana la compra de terrenos, después de que se alcanzase un acuerdo con el propietario de los mismos. El coste de la operación asciende a 140.000 euros, que el municipio sufragará con fondos del Plan Concellos de la Diputación. La superficie que se va a adquirir es de 3.700 metros cuadrados.

El Concello inicia así los trámites para la construcción de la segunda piscina cuando se cumplen 25 años desde que empezó a gestarse la primera. Paralelamente a la negociación para la compra de los terrenos, los servicios técnicos municipales fueron preparando el pliego de bases para la contratación de la redacción del proyecto técnico, que tendrá un importe de algo más de 60.000 euros.

La administración municipal señala que las obras propiamente dichas tendrán un coste aproximado de 1,3 millones de euros, y que el dinero procederá de las partidas del Feder que le corresponden a Vilagarcía y de los planes provinciales de inversiones que dependen de la Diputación. La intención del ejecutivo que dirige Alberto Varela es que los trabajos puedan adjudicarse este año, y que estén terminados en 2019.

Desde Ravella se indica que "con la construcción de la nueva piscina se pretende dar solución a la alta demanda de esta instalación deportiva, en la que confluyen los usuarios socios de la empresa concesionaria, los de la Fundación de Deportes, los que acuden por libre y los clubes deportivos que fueron surgiendo en los últimos años".

Este año, de hecho, se ha notado un incremento muy importante en el número de usuarios de la piscina, así como en las horas de entrenamiento de los clubes. Este hecho propicia que sea más complicado encontrar una calle libre o con pocos nadadores.

Una situación que podría complicarse en los próximos meses con el cierre por obras de la piscina de Cambados, ya que está previsto que un buen número de usuarios de esta última instalación acudan a Vilagarcía.

El Ayuntamiento explica asimismo que la construcción de la segunda piscina, "se incluye en un plan más ambicioso de reforma y mejora de las principales instalaciones deportivas de la ciudad, lo que abarca los campos de A Lomba y Vilaxoán, el pabellón número 1 de Fontecarmoa y hasta la actual piscina".

Esta última fue construida entre 1993 y 1994 dentro de un plan de inversiones en el que participaron la Xunta de Galicia, a través de la Secretaría Xeral para o Deporte, la Diputación de Pontevedra y el propio Ayuntamiento arousano. Se invirtieron 220 millones de pesetas (el equivalente a 1,1 millones de euros), y la instalación empezó a funcionar el 28 de febrero de 1994.

La gestión se le adjudicó a la Agrupación Galega de Ensino Deportivo, que por aquel entonces también era titular de las concesiones de las piscinas de Caldas y Vigo. Diez años después se cambió la gestión, y la nueva concesionaria introdujo mejoras, como la zona spa o el gimnasio. Hoy en día es una de las instalaciones deportivas con más usuarios de toda la comarca arousana.