Los trabajos de mejora de la red de saneamiento anunciados por el gobierno de Valga hace unos días han comenzado. Están en marcha las obras en Parafita, donde con apoyo económico de la Diputación de Pontevedra y una inversión de 45.000 euros se procede a la instalación de colectores con tubos de PVC de 135 milímetros de diámetro.

La mejora lleva pareja la colocación de pozos de registro "para posibilitar la limpieza de la red y las acometidas a las viviendas", según explican en el gobierno del conservador José María Bello Maneiro, convencido de que estas nuevas dotaciones "permitirán la evacuación de las aguas residuales procedentes de los inmuebles, eliminando los pozos negros y fosas sépticas existentes en la actualidad y evitando así posibles focos de contaminación ambiental".

Tras estas obras llegará otra de similar trascendencia, como es la ampliación del saneamiento en el lugar de Vilar, en la parroquia de Cordeiro, en este caso con un desembolso de casi 30.000 euros.

Se trata de mejoras -destacan en el Concello de Valga- que tienen una incidencia positiva en la preservación medioambiental, como también, apunta el propio alcalde, "tendrán una repercusión directa en la calidad de vida de los vecinos y contribuyen a la generación de empleo durante la ejecución de los trabajos".

Son, concluye Bello Maneiro, "dos proyectos de gran importancia para atender las demandas sanitarias de los vecinos que aún no poseen conexión o acceso a las redes generales de saneamiento, por lo que se ven obligados a emplear pozos negros o a verter sus aguas residuales en superficie, lo cual puede provocar problemas de salubridad a corto y largo plazo".