Los cazadores de la Asociación de Caza de Meaño claman ante la presencia de un cerdo muerto arrojado a los montes meañeses, a la altura de O Pino, un hecho denunciado a inicios de julio. El presidente del colectivo Rafael Otero lamenta el hecho así como la repetición de este tipo de episodios que suponen un problema de salubridad.
Se trata de un animal que fue descubierto en el monte por dos senderistas el domingo 2 de julio y que alertaron a la Policía Local meañesa, por cuanto el animal desprendía un olor nauseabundo dado su estado de descomposición. Dado su deterioro, fuentes consultadas recomendaban el enterramiento el animal. Sin embargo, los cazadores denuncian que "no se ha actuado o, si se hizo algo, fue de mala manera, porque el animal sigue en el lugar". Rafael Otero afirma que "el animal no ha sido retirado ni tampoco enterrado, porque no existe sobre el terreno señal alguna de desenterramiento por parte de algún animal carroñero, y el cerdo está tal y como se halló el 2 de julio, y alguien tiene que responsabilizarse de una situación así".
"Es una peste -lamenta Rafael Otero- lo que estamos padeciendo de un tiempo a esta parte en los montes de Meaño: que un caballo muerto, que si ovejas, que si un cerdo? Tenemos que ponerte coto entre todos a este tipo de desmanes, porque se está jugando con la salud de la personas".
Otero subrayó el compromiso de los cazadores: "Nosotros estamos más involucrados que nunca en sumar esfuerzos para denunciar las acciones y a los responsables de este tipo de vertidos, y hacemos un llamamiento a todos los vecinos para que estén atentos a lo que ocurre en el monte". Rafael Otero apela al sentido común: "Existe un seguro por el que pagas 8 euros al año y que si se te muere un animal una empresa especializada se desplaza a tu domicilio y lo retira".
