La reacción del Partido Popular, al conocer que se pasa el cobro del IBI sin estar aprobadas las prometidas ayudas, no se hizo esperar. El portavoz del PP, Tomás Fole, considera que "el PSOE, desesperado prometió una bolsa de ayudas de 90.000 euros para lograr 3 votos, pero a mediados de junio nada se sabe de ella, aunque para cobrarle los recibos a los vecinos no ha encontrado impedimentos. Esta es la constatación de que el grupo de gobierno traiciona hasta a sus socios más obedientes y castiga a la ciudadanía con una bolsa fantasma a la hora de bonificar los recibos de la contribución".

A Fole le sorprende que el edil del BNG Xabier Ríos se dé cuenta ahora de que "el alcalde pasa olímpicamente de los acuerdos plenarios que no le gustan. El dócil y servil BNG hasta ahora, acaba de abrir los ojos. Porque lo que no sorprende en absoluto es que el regidor siga con la obsesión de ganar dinero a costa de los vecinos".

El portavoz popular arremete contra el gobierno socialista por no aprobar la bolsa de ayudas, pero al mismo tiempo pone en duda su funcionamiento, dando a entender que la medida supondría un caos para el Concello.