Recién llegada de un concierto en Badalona, la polifacética Ses desembarcó este fin de semana en las fiestas de Santa Rita de Vilagarcía con toda la artillería pesada: la banda al completo, más de dos horas derrochando energía y potencial vocal sobre el escenario del parque de A Xunqueira y detalles y guiños con los que la cantareira -tal y como ella misma se define y se siente orgullosa- logró meterse en el bolsillo al público vilagarciano. La artista "berghantiñana", como suele hacer en todos sus conciertos, dejó clara su condición feminista y su firme compromiso con la lengua y cultura gallegas. Siempre reivindicativa, invitó a los arousanos "a la resistencia".

La voz de Ses comenzó a escucharse con apenas diez minutos de retraso sobre la hora prevista (a las 11 de la noche). Y lo hizo con "Opoñerse á extinción", de su nuevo trabajo. A continuación, también del último disco, "A paz esquiva", para después dar un salto al pasado e interpretar "Non son fada".

Sonaron temas de todos los discos. También algunos muy poco habituales en los directos de Ses, como "Unha mañá de setembro" (por ser lento) e incluso canciones de otros artistas. Así, como homenaje a Ana Kiro, la cantautora de Cee versionó "Ven, queridiño, ven, que che quero dar todo o meu cariño" y "Quéroche cantar Galicia".

Otra de las sorpresas fue la dedicación de un tema a su madre con motivo de su cumpleaños, también extensible a todas las madres "de niñas rabudas que no quisieron ser princesas".

Como suele ser habitual en sus puestas en escena, Ses explica con unas breves pinceladas el tema que a continuación va a interpretar y aprovecha para desnudar sin tapujos sus firmes convicciones, así como también dar alguna que otra lección literaria en clave didáctica.

En relación a la lengua, considera la artista que un idioma que no hablan los niños es una lengua muerta. Y Vilagarcía, que no se caracteriza precisamente por un alto índice de gallegohablantes, respondió de forma espectacular a los guiños de Ses, sobre todo en los míticos temas de "Canto aquí canto na Habana" y "Labregha berghantiñana", donde los espectadores se encargaron con entusiasmo de los coros.

Para estrechar todavía más la relación con el público, Ses adaptó alguna que otra estrofa con letras del cancionero popular arousano, como "Teño un amor en Rianxo e outro en Vilagarcía..."

Prueba del éxito cosechado por la cantareira de Bergantiños es que pese a actuar en un recinto al aire libre sin restricciones de entrada y salida -el concierto fue gratuito-, entre canción y canción había un silencio sepulcral. "Shhhh", conminaba algún que otro asistente.

La última fue "Tempestades de sal", que entonó la mayoría del público. No obstante no fue el único bis que Ses cantó en Vilagarcía, sino que fue generosa e interpretó tres. "Romance da bela rosa" y "Labregha berghantiñana" también formaron parte de la recta final del concierto.

La de ayer fue la segunda actuación de Ses en la capital arousana, pues en 2014 actuó en el Auditorio municipal. Y a tenor de la respuesta del público, donde a más de uno se le pusieron los pelos como escarpias, de haber una tercera vez, parece que Vilagarcía la recibiría con los brazos abiertos.