El "Olisan" se hundió a consecuencia de una vía de agua en el casco. Así lo asegura el patrón del buque, Marcos García, un vecino de Boiro de 36 años que trabaja en el mar desde su juventud, y que hace unos años se asoció con su hermano Marcial para comprarle este barco a un armador de Cambados. "Nos entró una vía de agua y ni nos enteramos. El barco se hundió en un minuto", afirma.

El "Olisan" es el pesquero que el miércoles por la tarde naufragó a cuatro millas de Cabo Prior, al norte de la provincia de A Coruña. A bordo iban tres hombres, todos ellos vecinos de Boiro, y fueron rescatados sanos y salvos por Salvamento Marítimo. Una vez en tierra, los dos hermanos fueron traslados al servicio de Urgencias del Hospital Universitario de A Coruña, donde les dieron el alta a las pocas horas. Pero como afirma Marcos García, "el cuerpo lo tenemos bien, lo malo es la cabeza".

Explica que la situación vivida fue tremendamente angustiosa. "Esos cinco minutos que tardamos en estar los tres en la balsa no se los deseo a nadie".

El siniestro se produjo sobre las 16.00 horas. Según el relato del patrón del buque, estaban pescando pulpo con nasas, y en el momento del siniestro estaban desplazándose a otra zona. Cuando de repente se declaró la vía de agua. "Nos pitó la alarma de incendios y se apagó el motor. Pero en cambio no nos pitó la del agua".

De todos modos, el boirense sostiene que no pensó que el buque fuese a hundirse tan rápido. "No pensábamos que fuese a ir al fondo tan rápido. Cuando el otro tripulante y yo fuimos a echar la balsa lo hacíamos pensando que era por precaución, por tenerla allí al costado. De hecho, le dije a mi hermano que fuese al puente a dar aviso por radio. Si supiese que el barco se iba a hundir tan rápido por supuesto que no le hubiese pedido que fuese al puente".

Pero el barco zozobró tan bruscamente que a los marineros no les dio prácticamente tiempo a reaccionar. Fue entonces cuando se activó la radiobaliza, un equipo que lleva incorporado un sensor que al entrar en contacto con el agua salada lanza automáticamente un mensaje por vía satélite indicando las coordenadas en las que se encuentra. Ese es el mensaje que recibió la central de coordinación de Salvamento Marítimo, y gracias al cual se activó la búsqueda.

Pero antes aún se llamó a las familias de los marineros, por si acaso la señal de la radiobaliza podía ser una falsa alarma. Marcos García apunta que "los medios de rescate aún tardaron un poquito, porque la radiobaliza no marca una ubicación exacta, sino un perímetro".

De todos modos, no se atreve a precisar cuanto tardó en llegar el helicóptero -cuyos tripulantes fueron los primeros en ver a los náufragos-, "porque en la balsa pierdes la noción del tiempo".

Sobre la situación del mar en el momento del naufragio, el patrón del "Olisan" explica que "estaba calmo y las condiciones meteorológicas eran buenas. Aún no se había levantado viento".

Centollo y vieira

Los hermanos García le compraron el "Olisan" hace unos años a un armador de Cambados. Pero el barco sigue teniendo como puerto base la localidad saliniense, y descarga cada cierto tiempo en el muelle de Tragove su mercancía. Así, por ejemplo, este invierno participaron en la campaña de la vieira, que califican de buena.

No opinan lo mismo de la de la volandeira, pues según Marcos García aunque ellos la cogen de buen tamaño, no había demasiada, por lo que terminaron cambiando de arte. El miércoles estaban pescando pulpo, y se encontraban en una zona donde hay otros barcos de características similares al "Olisan" participando en la pesquería de la caballa ("xarda").

Una campaña que está generando malestar en el sector debido a los cupos de captura. Los armadores de Pontevedra se consideran claramente discriminados con respecto a los demás de Galicia.