La situación podría afectar a otros molinos de río en la comarca que usan el cauce fluvial para demostraciones de molienda tradicional. Incluso en Meaño, apenas unos metros más abajo, se encuentra el de "Entremuiños", en la actualidad propiedad del concello, que organiza en él demostraciones de molienda tradicional para grupos organizados, lo mismo que en Ribadumia los de Batán, entre otros. Pero Dovalo insiste: "Soy conocedor del mundillo porque formo parte de la asociación Amigos dos Muiños, y ninguno ha recibido esta comunicación. Mi caso -añade- es una injusticia manifiesta o una persecución, alguien tiene que explicármelo".

Dovalo presentó en su descargo un pliego de alegaciones que le fueron denegadas. Su último asidero es el concello y la Mancomunidade do Salnés: "cuando los ayuntamientos están acometiendo la reconstrucción los molinos de río -explica- no están solicitando la gestión del agua, y ellos mismos están en idéntica situación a la mía, también están incumpliendo la norma". Con tal motivo acaba de presentar por registro en el concello de Meaño un escrito en el que solicita que las administraciones locales demanden a la Xunta la exención del canon del agua "a los molinos que, como el mío, funcionan como aulas didácticas o etnográficas, y donde no se cobra".