La iglesia parroquial de Cambados aplazó para ayer el acto conmemorativo de San Antonio Abad, protector de los animales, con la tradicional bendición de las mascotas en el atrio del templo. De este modo se reunieron más feligreses acompañados de sus mascotas para recibir la gracia de Dios.

El acto litúrgico tuvo lugar después de la misa de las doce del mediodía en el atrio de la iglesia parroquial de Cambados, donde esperaban los dueños con sus mascotas. La mayoría eran perros de distintas razas, tamaños y colores; pero también había gatos, tortugas y conejos.

Refugio

También estuvo presente en este acto de bendición de las mascotas una representación del refugio de animales de Cambados, con un total de cinco perros que no tuvieron problemas para relacionarse con otros más afortunados y mejor ataviados que estaban con sus amos. La mayoría de los canes llevaban abrigo para protegerse del frío y, entre los asistentes había un perro con traje de gala y pajarita a juego.