El furtivismo continúa y demuestra cada semana que no hay especie que se resista a esas personas que actúan de manera ilegal sin importarles el daño que causan a los recursos ni los riesgos que la comercialización de ciertas especies puede acarrear para la salud pública. Así lo demuestra un informe de Gardacostas de Galicia referido a operativos desplegados en los últimos días en las diferentes rías, entre los cuales llama poderosamente la atención el hecho de que incluso se trafique con mejillón.

Las especies preferidas por los furtivos suelen ser el centollo, la nécora, almejas, pulpo y vieiras, pero esta vez también fue posible recuperar 110 kilos del "oro negro" de batea; una especie que puede causar graves daños al consumidor si procede de zonas afectadas por biotoxinas y se consume sin depurar.

A Pobra y Palmeira

Sucedió en un control efectuado en A Pobra do Caramiñal y Palmeira (Ribeira), donde junto al mejillón los funcionarios de Gardacostas decomisaron 47 aparejos que estaban sin identificar, la mayoría nasas, y también 180 kilos de nécora, una especie que está en veda desde el día 5 y que, por cierto, también se encontró en el mercado coruñés de Conchiñas.

El balance total de los controles efectuados a lo largo de la pasada semana en Arousa incluye 729 kilos de pescados y mariscos, 132 útiles de pesca y marisqueo y 2.200 metros de artes de enmalle, es decir, las redes que suelen emplearse para capturar especies como el centollo y que algunos desaprensivos utilizan sin control alguno -por eso no las identifican- para pescar más de la cuenta.

Pero no solo en Arousa existe el furtivismo, de ahí que los controles de Gardacostas también permitieran recuperar 282 útiles y cerca de 54 kilos de producto en la ría de Pontevedra, destacando la intervención de 235 nasas de pulpo sin identificar, junto a 33 kilos de esta especie y 2,6 kilos de nécora.

Vigo y Cíes

Ya en la ría de Vigo fueron doscientas las nasas interceptadas, procediéndose al decomiso de 64 kilos de peces y mariscos. Destaca el hecho de que 136 de esas nasas se localizaran en el entorno de las islas Cíes, donde los agentes requisaron veinte kilos de pulpo.

Sin salir de las Rías Baixas, el servicio de control dependiente de la Consellería do Mar actuó en Muros-Noia, en este caso con la aprehensión de 155 útiles empleados por los furtivos o pescadores ilegales, junto a catorce quilos de pescados y mariscos.

En este caso el operativo más relevante se saldó con la localización de sesenta nasas de pulpo, tal y como explican en Gardacostas.

Por último, decir que en Lira (Carnota) también abundan las nasas ilegales, de ahí que en esta ocasión los funcionarios de la Xunta recuperaran 104 de ellas, junto a diecisiete kilogramos de producto, la mayoría pulpo.