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Cambados recoge en una muestra obras de la juventud de Leiro, Lino Silva y Paz

El pazo de Torrado acoge una exposición que reúne pizas de las grandes "estrellas" del arte cambadés y de creadores del grupo FOGA, como "Kukas", Anselmo Lamela o Méndez

Una de las pinturas de Lino Silva. // Iñaki Abella

El pazo de Torrado, en Cambados, acoge desde mañana y hasta el 8 de enero una exposición de arte que está llamada a ser una de las muestras más destacadas del año. "Cambados e FOGA" recogerá obras de juventud de los creadores plásticos más conocidos de Cambados, como Francisco Leiro, Manolo Paz y Lino Silva, así como piezas de los pintores y escultores que conformaron el grupo FOGA (Fato Ounirista Galego), entre los que se encuentran "Kukas" -creador de la conocida compañía de títeres-, José Manuel Méndez, Yayo, Luis Fega o Anselmo Lamela.

El grupo FOGA nació en febrero de 1975 en Santiago de Compostela. Anárquico en su organización y ecléctico en sus gustos, aglutinó en su día a algunos de los creadores jóvenes más renovadores del momento, algunos de los cuales se convertirían con el paso de los años en piezas clave del arte gallego de entre siglos.

FOGA realizó exposiciones por diversos puntos de la geografía gallega, y una de sus paradas fue la Sociedade Cultural de Cambados, donde se sumaron al "fato" unos jovencísimos Francisco Leiro, Lino Silva y Carlos Otero Oubiña. Años después, en 1982, también se aproximó al grupo Manolo Paz, aunque para entonces el FOGA como tal ya estaba en descomposición.

El Fato Ounirista Galego forma parte de la historia del arte gallego de las últimas décadas, y de hecho Santiago de Compostela acogió el año pasado una muestra sobre el 40 aniversario del grupo. La idea de traer la obra de estos creadores a Cambados partió de José Vaamonde y Héctor Quintela, que están preparando un libro sobre Lino Silva.

Piezas poco conocidas

La exposición permitirá conocer facetas poco conocidas de creadores de renombre, como el propio Francisco Leiro. Éste aporta a "Cambados e FOGA" media docena de esculturas de inspiración surrealista, elaboradas con materiales como madera, bronce o escayola policromada. José Vaamonde sostiene al respecto que "aunque en ellas se ve la mano de Leiro, es un Leiro distinta al expresionista que hoy en día se conoce más".

Algo similar ocurre con Lino Silva, de quien el público no verá sus "carnavaladas", sino pinturas más vinculadas al surrealismo, "aunque en esa época Lino ya empezaba a probar con el expresionismo", apostilla Vaamonde. Así, se verán algunas de sus "Variaciones sobre Velázquez", con una fragua de Vulcano o su tétrica "Santa Mariña no medio do mar".

Manolo Paz también sorprenderá a quienes no conozcan en profundidad su trayectoria o a los más jóvenes, pues las esculturas en piedra o mármol dejarán paso a un par de cuadros tridimensionales, en los que fusiona pintura con escultura, mediante la utilización de pigmento, pero también de tablas, telas y hasta unas zapatillas.

Otro de los grandes atractivos de esta exposición es que permitirá al gran público conocer la obra de Carlos Otero Oubiña, un vecino de San Tomé que a diferencia de sus tres convecinos antes citados no intentó dedicarse profesionalmente al arte, si bien nunca dejó de pintar. Y en palabras de Vaamonde tiene un trabajo cuidadoso, coherente y de gran calidad, de ahí que de algún modo esta exposición sea también una forma de poner en valor su propuesta artística.

Todas las obras que se expondrán en Cambados son de entre la segunda mitad de la década de los 70 y la primera de la de los 80. La mayor parte fue cedida por los propios artistas, aunque Vaamonde y Quintela también han tenido que hacer bastantes kilómetros en coche en los últimos días para recoger la obra de otros artistas, como el propio Lino Silva, que se custodian en colecciones particulares.

La exposición se inaugura mañana viernes a las 20.00 horas.

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