Tras seis años de gestiones, primero con el proyecto de ampliación del cementerio parroquial y después reconvirtiéndolo en uno civil, al encontrarse con trabas de la Iglesia, los directivos de la comunidad de montes de Rubiáns han solicitado la colaboración municipal para agilizar el expediente que vuelve a encontrarse con nuevas trabas. El permiso preceptivo de Sanidade, que en el primer trámite llevó años, es una de las cuestiones que más preocupan por lo que en la reunión celebrada ayer el alcalde se comprometió a gestionar ante este departamento una entrevista y acompañar a los comuneros en esta delicada misión.

Se da la circunstancia de que el proyecto, que inicialmente se tramitó como ampliación del actual cementerio parroquial, logró ya el permiso de Sanidade, pero ahora se requiere uno nuevo porque fue modificado para una necrópolis civil.

Los comuneros presididos por Xurxo Abuín presentaron ayer en el Concello la certificación de la empresa que lleva el saneamiento del municipio indicando que no existe ningún problema para extender la red del saneamiento unos metros hacia la parcela elegida para el desarrollo de este proyecto. También se aporta un certificado similar de la concesionaria del abastecimiento de agua, servicios que debe tener la parcela para acoger el nuevo recinto mortuorio.

La sorpresa radicó en que, entre los requisitos exigidos por algunos departamentos de la Administración figuraba la presentación de la escritura de los terrenos donde se pretende llevar a cabo el proyecto, algo que los comuneros consideran ilegal, según los informes de su asesoría técnica.

Pero no es el único documento que ha provocado la sorpresa de los promotores del nuevo cementerio. Augas de Galicia, que ya había informado sin problemas el anterior proyecto con base en toda la documentación presentada y que se ha vuelto a repetir en el expediente actual, incluido el informe hidrogeológico, ahora pide a los comuneros un "perfil longitudinal" de un río que no existe en esta zona.

"Esperemos que, con la colaboración municipal, podamos salvar los escollos en la tramitación del expediente para el nuevo cementerio de Rubiáns y que el año próximo se puedan iniciar las obras, porque el actual camposanto está colapsado, ya no hay espacio" declaró Xurxo Abuín.

En la actualidad, si fallece algún vecino de la parroquia, la familia tiene que acudir al cementerio de Cea o al general de Vilagarcía lo que supone un problema para los vecinos de Rubiáns.