El vial que une la parroquia vilanovesa de Baión con el Hospital de O Salnés sigue sin tener muy claro de quién es propiedad. Las obras para asegurar el talud del que se han desprendido las piedras que obligaron a su cierre y por las que se acabaron enfrentando Vilagarcía y Vilanova, serán asumidas por Fomento, pero el Ministerio ha comunicado al primero de los Concellos que su intención es levantar un acta de deslinde y, a partir de ahí, concretar las competencias sobre la vía.

Así lo reconocía ayer el Concello de Vilagarcía en una nota de prensa en la que también se aseguraba que Fomento va a reforzar con sus propios medios el cierre a la circulación, una decisión que, desde el ayuntamiento que dirige Alberto Varela, se considera que avala la que se tuvo en un primer momento, cuestionada desde el vecino Concello de Vilanova. Además, el Ministerio también va a asumir los trabajos de consolidación del talud para evitar más desprendimientos de rocas. Desde el Ministerio también considera que existe un importante riesgo de nuevos desprendimientos por lo que, por precaución, ha decidido mantener cerrada la vía al tráfico hasta que se garantice la estabilidad de la pared de piedra y la completa seguridad de la vía, dado que el asunto principal y más urgente es garantizar la seguridad de las personas. Coincide esta postura con la que esgrime el concello vilagarciano, postura que se basa "en el informe del servicio municipal de emergencias, en un estudio geotécnico y en la inspección ocular de los técnicos de carreteras".

Desde el Ministerio se aseguró que se van a asumir los trabajos de consolidación del muro del talud, "independientemente de que la titularidad de este vial secundario no está definida", explican desde el Concello de Vilagarcía.

Pese a la decisión de hacer un acta de deslinde, desde el otro municipio implicado en el conflicto, el de Vilanova, no se tiene ninguna duda: "Ese vial pertenece a Fomento y fue asfaltado por la Diputación a petición de este Concello y del de Vilagarcía cuando gobernaba Tomás Fole".

Durán volvió a realizar unas duras declaraciones contra Alberto Varela, al que acusó de "no conocer las carreteras de su Concello y no preocuparse de su mantenimiento; si las piedras hubiesen caído sobre un vehículo, la responsabilidad sería única y exclusivamente suya, por no haberse preocupado de evitarlo". Para Durán, "cerrar ahora la carretera sin haber tomado las medidas adecuadas antes es como vigilar el Titánic una vez que se ha hundido".

Recuerda Durán que el primero en contactar con Fomento fue él, mientras "otros no acertaban con la administración a la que llamar, cuando un alcalde debe saber de quien son todas las carreteras que atraviesan su territorio, algo que yo sí sé".